EL 22 de julio de 2011 un sujeto ultraderechista cometió dos atentados en Oslo Y Utoya, Noruega, matando a 77 personas en lo que constituye el desastre más importante en Noruega desde la Segunda Guerra Mundial
Los ataques consistieron en una explosión en Oslo, capital del país, y un tiroteo en la Isla de Utøya en el lago Tyrifjorden. En días posteriores a la tragedia, la policía hablaba de 93 muertos, pero revisó la cifra a la baja porque algunos cuerpos fueron contados dos veces. El autor de las masacre fue Anders Behring Breivik, empresario noruego de 32 años descrito por la policía como simpatizante de ultraderecha, fundamentalista cristiano", nacionalista, pro israelí y admirador del movimiento político estadounidense del Tea Party. En un principio se pensó que los atentados eran obra de Al Qaeda.
A las 3:26 de la tarde, se produjo una explosión en el entorno de la oficina del primer ministro Jens Stoltenberg, en una zona donde se ubican los edificios gubernamentales, siendo la sede del Ministerio de Petróleo y Energía el edificio más dañado pues quedó destruido y el lugar parecía una zona de guerra". El atentado fue perpetrado por Behring Breivik mediante un coche bomba y la policía acordonó el área hasta cinco manzanas en torno del edificio, evacuando as la gente del resto de los edificios gubernamentales.
Testigos en el lugar aseguraron que pudo tratarse de un coche-bomba y el estruendo de la explosión y la onda expansiva se dejaron sentir en varios kilómetros a la redonda. El atentado causó fuertes daños en los edificios circundantes, entre ellos los complejos gubernamentales denominados H e Y que contienen murales diseñados por Picasso.
Horas después se supo que un individuo disfrazado de policía había reunido a todos los que se encontraban en el islote de Utoya al norte de la capital con la intención de llevar a cabo un control de seguridad, pero luego abrió fuego en el campamento juvenil político del Partido Laborista Noruego donde al día siguiente iba a participar el primer ministro con las juventudes de su partido. El asesino iba armado con una pistola y un rifle, disparando sobre ellos indiscriminadamente. De acuerdo con la policía local, 69 personas murieron víctimas del ataque, muchas, ahogadas mientras escapaban.
La masacre duró 45 minutos, tiempo en el cual el pistolero dispara con pausas de 10 segundos mientras celebraba con gritos de victoria. La policía tardó en llegar a la isla 47 minutos, y 2 minutos después el asesino se rindió, por lo que se dice que muchas vidas pudieron salvarse sí la policía hubiera llegado antes a Utøya.
En un principio, un comunicado de un grupo islamista llamado Ansar al-Jihad al-Alami se adjudicó los ataques pero poco después, quien había reclamado el atentado en nombre de ese grupo "se retractó". El asesino, detenido en el islote de Utøya, era Anders Behring Breivik, quien había subido mensajes en Internet declarándose enemigo de la sociedad multicultural, y que de acuerdo con su abogado, dijo que su acción fue "atroz" pero "necesaria".
Además se supo que planeó su acción durante mucho tiempo y había redactado un "manifiesto" que subió a internet antes de los ataques. También se supo que Breivik se identificaba con los Caballeros Templarios y que había subido un vídeo en YouTube donde llamaba a sus seguidores a la guerra contra el marxismo y el Islam, apareciendo con un fusil y un parche en el brazo que decía "Cazador de Marxistas".
El 24 de agosto de 2012, fue declarado mentalmente sano y condenado a contención, forma especial de pena de prisión que puede ser extendida indefinidamente una y otra vez con un período aproximado de 21 años y un tiempo mínimo de 10 años, la pena máxima en Noruega.
Breivik no apeló y el 8 de septiembre los medios de comunicación anunciaron el veredicto final. De acuerdo a declaraciones dadas por su abogado, Øystein Storrvik, en marzo de 2016, Breivik se había convertido en nazi en la cárcel.
