top of page
  • Laura Meléndez

Una perrita fue lanzada al espacio por los soviéticos hace 66 años: Laika


La Unión Soviética lanzó al espacio el segundo satélite que llevaba a bordo un ser vivo, el Sputnik II con la perra Laika. Sucedió el 3 de noviembre de 1957

 

El Sputnik 2 fue la segunda nave espacial puesta en órbita alrededor de la Tierra, el 3 de noviembre de 1957, siendo la primera nave espacial que transportó material biológico. Era una cápsula cónica de 4 metros de alto con una base de 2 metros de diámetro, que tenía varios compartimentos con transmisores de radio, un sistema de telemetría, una unidad programable, un sistema de control de regeneración y temperatura en cabina e instrumental científico, y en una cabina sellada y separada del resto viajaba la perra Laika, cuyo nombre original era "Kudryavka".

 

Los datos biológicos e ingenieriles se transmitían mediante el sistema telemétrico Tral_D, que podía transmitir datos a la Tierra durante 15 minutos por cada órbita. A bordo había

dos espectrómetros destinados a medir la radiación solar, y el Sputnik 2 no llevaba cámara de televisión.

 

El primer ser en entrar en órbita fue Kudryavka , que significa en ruso "pequeña de pelo rizado", la cual sería conocida mundialmente como Laika debido al nombre de su raza y pesaba 6 kilogramos. Laika, fue sometida a entrenamiento con otros dos perros, y finalmente fue elegida como la tripulante de la nave espacial soviética Sputnik 2, lanzada al espacio exterior el 3 de noviembre de 1957.

 

La cabina presurizada del Sputnik 2 le permitía estar acostada o en pie y estaba acolchada. Un sistema regenerador de aire le proveía de oxígeno; la comida y el agua se encontraban en forma de gelatina y  Laika estaba sujeta con arnés, una bolsa recogía los excrementos, y unos electrodos monitorizaban las señales vitales.  Un informe telemétrico indicaba que Laika estaba agitada pero comía.

 

No había posibilidad de retorno a la Tierra Y se planeó sacrificarla después de 10 días en órbita. Pero, en octubre de 2002 se reveló por fuentes rusas que Laika había muerto a las pocas horas por el sobrecalentamiento y el estrés. La misión suministró a los científicos los primeros datos del comportamiento de un organismo vivo en el medio espacial.

 

Como se sabía poco sobre los efectos que los vuelos espaciales podían producir sobre los seres vivos en el momento de la misión de Laika, y la tecnología de suborbital no se había desarrollado todavía, no había ninguna expectativa de que la perrita sobreviviera. Algunos científicos creían que los humanos no podrían sobrevivir al lanzamiento o a las condiciones del espacio exterior, por lo que los ingenieros de vuelos vieron en los animales precursores necesarios para las misiones humanas.

 

Tras Laika, la URSS envió 12 perros más al espacio, de los cuales cinco de ellos regresaron con vida a la Tierra. El 11 de abril de 2008, las autoridades rusas develaron un monumento a Laika, construido cerca del centro de investigación militar en Moscú que preparó vuelo. 

logotipo.png
primavera 3.jpg
bottom of page