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  • Laura Meléndez

Adolfo Hitler y Eva Braun se casaron hace 79 años, antes de suicidarse

Fue cerca de la medianoche de un 28 de abril pero de 1945, en Berlín, cuando el dictador nazi Adolfo Hitler y Eva Braun contrajeron matrimonio, 2 días antes de suicidarse.

 

Adolfo Hitler y el nazismo ha estado en los últimos 2 años en boca de millones de personas, en un capítulo que parecía, si no olvidado porque no debe ser, sí sepultado. Los rusos acusan a Ucrania de ser un régimen nazi, y lo mismo hace el gobierno de Israel para calificar cualquier expresión en su contra por su guerra de exterminio contra Gaza, al grado de acusar a quienes les critican de antisemitas, cuando en realidad son expresiones contra el gobierno de Israel, no contra el pueblo judío.

 

Hoy recordamos al líder nazi y a su esposa, Eva Braun, quienes se suicidaron el 30 de abril de 1945, y que 2 días antes, el 28, un día como hoy, decidieron casarse en el búnker.

 

Nacida en Múnich, Eva Braun fue la segunda de las 3 hijas de un maestro de escuela, y una costurera, quienes se separaron en 1921 y volvieron a casarse al año siguiente, principalmente por razones económicas. Eva fue educada en un liceo católico de Múnich y estudió año en la escuela de negocios del Convento de las Hermanas Inglesas en Simbach am Inn, donde destacó por su talento para el atletismo.

 

A los 17 años consiguió trabajo en el estudio de Heinrich Hoffmann, fotógrafo oficial del Partido Nazi.  Y en octubre de 1929 conoció a Adolfo Hitler en Múnich, presentado con el mote de “Herr Wolff”. Su vida cambiaría para siempre.

 

Previamente el Führer nazi vivió con su media sobrina Geli Raubal entre 1929 hasta la muerte de ella en septiembre de 1931, cuando se suicidó en su apartamento en Munich; la relación con Geli fue muy importante para Hitler, pero después comenzó a ver con más frecuencia a Braun, quien también intentó quitarse la vida en agosto del año siguiente. Tras su recuperación, ambos se acercaron más y hacia finales de 1932 se convirtieron en amantes. Cuando Hitler estaba en Múnich, pasaban la noche juntos en el apartamento que él poseía en la ciudad, y a partir de 1933 Braun trabajó como fotógrafa para Hoffmann, lo cual le permitió viajar como parte del séquito del nazi.

 

El romance con el Führer les proporcionó a Eva y a su hermana comodidades, obsequiándole en 1933 una villa en Bogenhausen y un apartamento en la Cancillería del Reich; Eva obtuvo el derecho de acudir al congreso del partido nazi en Núremberg en 1935 y al año siguiente comenzó a acompañarlo en su residencia de Los Alpes, aunque la mayor parte del tiempo ella vivía en Múnich.

 

Hitler quería cultivar una imagen de héroe casto en la ideología nazi donde los líderes y combatientes eran los hombres mientras que las mujeres eran amas de casa, por lo que la pareja nunca apareció junta en público. La única ocasión en que se dejaron ver fue durante los Juegos Olímpicos de Invierno de 1936, y el pueblo alemán no supo de la relación después de la Segunda Guerra Mundial.

 

Según los historiadores la influencia de Braun en las decisiones de Hitler parece mínima pues no intervenía en asuntos políticos ni de negocios, llevando una vida protegida y privilegiada, lo mismo en tiempos de triunfo para el nazismo al conquistar buena parte del territorio de Europa, que en los años aciagos de 1942 a 1945 cuando se volvió irreversible la derrota de Alemania.

 

En abril de 1945 Eva viajó de Múnich a Berlín para estar con Hitler en el bunker cuando el Ejército Rojo comenzó el asedio de la capital, y decidió seguir a su lado hasta el final. Ante la caída inminente del régimen, se casaron el 28 de abril en una modesta ceremonia civil dentro del búnker. Joseph Goebbels y Martin Bormann fueron testigos del enlace, y con el matrimonio, Eva Braun pasó a llamarse Eva Hitler.

 

Después de las 13 horas del 30 de abril, Braun y Hitler se despidieron del personal y miembros de su círculo más cercano. Un par de horas después varios testigos escucharon un disparo…2 asistentes del Führer, Heinz Linge y Otto Günsche, entraron en su estudio y encontraron los cuerpos sin vida de Braun y Hitler sobre un sofá. Ella había ingerido una cápsula de cianuro y él se había disparado en la sien derecha con su pistola. Los cuerpos fueron llevados afuera del búnker hacia el jardín detrás de la Cancillería del Reich, donde fueron parcialmente incinerados.

 

Eva Braun tenía 33 años y Hitler 56.

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