Fue un 14 de octubre pero de 1582 en Roma, cuando el papa Gregorio 13 decretó el calendario gregoriano en sustitución del juliano, y así, la noche del jueves 4 de octubre dio paso al viernes 15 de octubre, por lo cual el día 14 de ese año nunca existió en Italia, Polonia, Portugal y España. Sí, del 4 al 15
El Calendario Gregoriano es el más popular y la mayor parte del mundo lo usa para la medición del tiempo. Su origen es europeo y adquirió su nombre del Papa Gregorio 13 desde que oficializó su instauración, luego de que por muchos años se utilizara el calendario juliano desde que Julio César lo instaurara en el año 46 antes de Cristo.
Cada vez que se produce un cambio en la medición del tiempo, aparecen datos curiosos. El cambio del calendario juliano al gregoriano supuso la desaparición de 10 días. El juliano se usó por última vez el 4 de octubre de 1582 y el siguiente día fue automáticamente 15 de octubre, ya que se regía según el calendario gregoriano.
Casi todos los países católicos se acogieron al calendario gregoriano en tanto que los anglicanos, ortodoxos y protestantes, introdujeron el calendario gregoriano paulatinamente aunque hoy día, algunas iglesias ortodoxas siguen usando el juliano.
El día, es la unidad fundamental de tiempo del calendario gregoriano y equivale aproximadamente a 86.400 segundos del Tiempo Atómico Internacional que es el que se debe ajustar al verdadero movimiento de rotación terrestre, que se retrasa con respecto a la duración del mismo. Asimismo, la Semana corresponde a un periodo de 7 días.
El impulsor de la reforma del calendario es Ugo Buocompagni, jurista eclesiástico, elegido papa el 14 de mayo de 1572 bajo el nombre de Gregorio XII, creándose la Comisión del Calendario, en la que destacan Cristóbal Clavio y Luis Lilio. Clavio, astrónomo jesuita, era un reputado matemático y astrónomo avalado por Galileo e incluso, un cráter de la Luna lleva su nombre.
Lilio era médico, astrónomo y principal autor de la reforma del calendario, pero murió en 1576 sin ver culminado el proceso. El valor dado al año trópico en las Tablas alfonsíes de 365 días 5 horas 49 minutos y 16 segundos es el tomado como correcto por la Comisión del Calendario.
A pesar de que en sus países el calendario gregoriano es el oficial, las iglesias ortodoxas excepto la de Finlandia siguen utilizando el calendario juliano pese a que, fuera del mantenimiento de un calendario eclesiástico diferente en algunos países, el calendario gregoriano es el que se considera como base para el establecimiento del año civil en todo el mundo, dividiéndose en el año común de 365 días, el año bisiesto de 366 días, y el año secular, terminado en "00".
Es año bisiesto el que sea múltiplo de 4, con excepción de los años seculares. De esta manera, el calendario gregoriano se compone de ciclos de 400 años:
A pesar de que el calendario persa es más preciso que el Calendario gregoriano, en el que hay un error de un día cada 3300 años mientras que en el calendario persa el mismo error aparecería cada 3.5 millones de años, la importancia del calendario gregoriano estriba en que el sistema de tiempo gregoriano usado universalmente, incluso en Irán, la antigua Persia.
Así, el problema del origen de nuestra era y los que se derivan del empleo de múltiples calendarios diferentes quedó resuelto con la creación del calendario gregoriano: si en él se afirma que la Era Cristiana comenzó 1582 años antes de su elaboración y todos los países respetan esta idea, toda discusión debería acabar; y los temas de cuándo nació Cristo o lo que estableció Dionisio el Exiguo dejan de tener importancia
