El Fondo Monetario Internacional informó este martes que de acuerdo con sus estimaciones, la economía de América Latina y el Caribe crecerá 2,3% este año, 0,4 puntos porcentuales más que lo que se proyectaba en julio.
La nueva previsión significa un descenso contra el resultado de 2022, cuando la economía de la región creció 4,1%, debido a una "normalización del crecimiento junto con el efecto de políticas monetarias más estrictas, un entorno externo más débil, y una caída del precio de las materias primas".
El Fondo reviso al alza en especial las previsiones de Brasil, que crecerá 3,1%, es decir un punto porcentual más del estimado en julio, debido a su actividad de la agrícola y del sector servicios durante el primer semestre del año.
Asimismo, el FMI revisó al alza el crecimiento de México en 0,6 puntos porcentuales para fijar la tasa de este año en 3,2%, gracias a una recuperación pospandémica en la construcción y los servicios, además de beneficiarse de la demanda en Estados Unidos.
Para 2024, el Fondo pronostica una expansión de 2,1% de la economía mexicana.
Mientras tanto, otras economías regionales importantes registrarán una contracción este año, como Argentina, con un crecimiento del PIB del -2,5% en 2023 y una inflación proyectada de 121,7% para este año-, y Chile, con un -0,5%
A nivel global, se mantuvo su previsión de crecimiento mundial de 3% para 2023, y recortó la de 2024, a 2,9%, en comparación con la estimación de julio.
El organismo advirtió de los signos de flaqueza mostrados por algunas economías importantes, sobre todo en Europa, mientras revisó al alza sus previsiones para Estados Unidos, cuya economía debe crecer 2,1% este año y 1,5% en 2024.
