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  • Laura Meléndez

Enorme representante de la música ranchera, vencida por el alcohol: Lucha Reyes


Esta vez hablamos de una mexicana en nuestra efeméride de hoy. Se trata de María de la Luz Flores Aceves, a quien conocimos como Lucha Reyes, cantante de música ranchera y actriz mexicana nacida el 23 de mayo de 1906 en Guadalajara. Hace ya laaaaargos 116 años.

Lucha no conoció a su padre y el apellido Reyes lo tomó del segundo esposo de su madre, quien se hizo cargo de ella hasta que llegó a la adolescencia. En sus inicios como cantante, ganó el título de Reina del Mariachi en Guadalajara y viajó con su familia a la Ciudad de México, pero las cosas fueron difíciles, ya que la mala situación económica de sus padres le impidió terminar su educación primaria.

Ingresó al coro de la Iglesia del Carmen y su carrera profesional se inició a los 13 años, en una carpa de la plaza de San Sebastián, alternando al paso del tiempo con Amelia Wilhelmy, José Limón y los hermanos Acevedo. Viajó a Estados Unidos en 1920 para estudiar canto y desarrollar su timbre de soprano, siendo contratada para una gira en aquel país con gran éxito.

Lucha regresó a México y formó con las hermanas Ofelia y Blanca Ascencio, el trío Reyes-Ascencio, aunque su adicción por el alcohol y continuos incidentes durante sus presentaciones la llevaron a ser despedida del trío.

En 1927 reinició su carrera con el Cuarteto Anáhuac, con el que realizó una gira por Alemania, donde una infección de garganta la alejó del micrófono un año. La necesidad de dinero la hicieron retornar a la actividad y debido a la infección, su voz se tornó rasposa, imponiendo un estilo agresivo a sus interpretaciones.

A partir de 1928 Lucha Reyes entró a la interpretación vernácula como solista, creando canciones de éxito como “La Tequilera”, “¡Ay Jalisco no te rajes!”, “El Corrido de Chihuahua”, “El Herradero”, “La Panchita”, “Traigo un amor”, “Juan Colorado” y “El Castigador.

Captó la atención de productores de cine, y trabajó en cintas como Canción del alma (1937), La tierra del mariachi (1938), Con los dorados de Villa (1939), El zorro de Jalisco (1940), y ¡Ay Jalisco, no te rajes! (1941).

Lucha Reyes causaba tumultos en los lugares donde se presentaba. Colocada como el centro del escenario y con una botella de tequila en la mano, cantaba de manera espectacular. En los últimos años de su vida, comenzó a buscar el alcohol como bebida esencial.

En mayo de 1944, Lucha Reyes sufría una fuerte depresión tras la muerte de Francisca Cervantes, madre de su primer marido y el 23 de junio de ese año, llamó a su hija para que le comprara un frasco de medicinas, las cuales se tomó quedando profundamente dormida.

Fue su hija quien la encontró inconsciente y pidió ayuda, siendo trasladada a un hospital en donde los esfuerzos por salvarla fueron inútiles, siendo declarada muerta el 25 de junio de 1944.



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