La Asamblea General de la ONU votó esté miércoles que Rusia cese su ataque en Ucrania y retire de ese país a sus fuerzas militares, en una sesión en la que apenas 4 naciones sufragaron a favor de la postura bélica de Moscú.
La votación final fue de 141-5, con 35 abstenciones, en una sesión de Asamblea de 193 miembros que no se tenía desde hace un cuarto de siglo.
Las resoluciones de la asamblea general no son vinculantes legalmente, pero vienen a ser una especie de opinión internacional, y no pueden ser vetadas como sí sucedió hace unos días cuando Rusia detuvo con su voto en contra una resolución similar en el Consejo de Seguridad.
Más de 90 países impulsaron está resolución en la Asamblea General, misma en la que se condena la agresión rusa contra Ucrania “en los términos más enérgicos” y exige la suspensión inmediata del uso de la fuerza por parte de las fuerzas castrenses del Kremlin, así como el retiro inmediato completo e incondicional de los soldados rusos del territorio ucraniano.
La medida llama de paso a Rusia a que de marcha atrás en su decisión de reconocer la independencia de 2 regiones separatistas del oriente de Ucrania: Lugansk y Donetsk.
Los países que respaldaron a Rusia fueron Bielorrusia, Eritrea, Corea del Norte y Siria.
Quienes se abstuvieron fueron Angola, Argelia, Armenia, Bangladesh, Bolivia, Burundi, República Centroafricana, China, Congo, Cuba, El Salvador, Guinea Ecuatorial, India, Irán, Irak, Kazajistán, Kirguistán, Laos, Madagascar, Malí, Mongolia, Mozambique, Namibia, Nicaragua, Pakistán, Senegal, Sudáfrica, Sudán del Sur, Sri Lanka, Sudán, Tayikistán, Uganda, Tanzania, Vietnam y Zimbabwe.
