El exfutbolista brasileño Dani Alves seguirá tras las rejas, luego de que la Audiencia de Barcelona le negara de nueva cuenta la posibilidad de obtener la libertad provisional que solicitaron sus abogados, toda vez que está acusado de agresión sexual, hay riesgo de que se de a la fuga y el juicio está a la vuelta de la esquina.
Esta ha sido la tercera ocasión que la Audiencia catalana descarta los recursos legales presentados por el amazónico contra el auto de prisión que dictó la juez instructora, y que lo envió a la cárcel donde se encuentra desde el pasado 20 de enero en el centro penitenciario de Brians 2.
Dani es acusado de violar a una joven el pasado mes de diciembre en una discoteca de Barcelona, y en esta última determinación de la Audiencia contra el recurso de súplica, la sección 21 de la entidad impartidora de justicia denegó la petición de libertad formulada por Alves el pasado 7 de noviembre, y mantiene al jugador en prisión provisional, comunicada y sin fianza.
La Audiencia precisa en su resolución en contra del criterio esgrimido por la defensa del brasileño, que persiste el riesgo de fuga, puesto que no han variado las circunstancias.
Más aún, para la sala, en la medida en que se ha acordado la apertura de juicio oral contra Alves, que Fiscalía ya ha presentado escrito de acusación en el que pide 9 años de prisión y dada la proximidad de su celebración, esto “no hace más que incrementar el riesgo de fuga” y apunta en el auto que “solamente la prisión preventiva podrá evitar dicho riesgo”.
Añade que “ninguna de las medidas alternativas” propuestas en su día por la defensa del jugador “podría conjurar el riesgo de fuga”.
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