Siguen sin acordar Israel y Hamás alto al fuego

En medio de señalamientos entre ambos bandos, Israel y el movimiento islamista Hamás, las negociaciones indirectas que se llevan a cabo en Catar con la mediación de ese país, Egipto y Estados Unidos, para alcanzar un alto el fuego en la Franja de Gaza, registraron pocos avances

Mientras tanto, el ejército judío no dejar de asesinar a civiles en el enclave palestino, y en el transcurso del sábado perdieron la vida decenas de habitantes de Gaza como consecuencia de los ataques israelíes.

Los equipos negociadores de hebreos y palestinos trabajan en Doha para intentar llegar a una tregua en el conflicto iniciado por el ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, y que derivó en una brutal respuesta de un ejército bien equipado con la ayuda de Estados Unidos como el judío

Una fuente palestina aseguró a la agencia AFP que los mediadores están encontrando "obstáculos y dificultades complejas" que parten de la negativa israelí de abandonar el territorio de Gaza.

Mencionó la insistencia de Israel en ceñirse a un mapa que prevé "el mantenimiento de fuerzas en más del 40% de la superficie de la Franja de Gaza", en un territorio de más de 2 millones de habitantes devastado por más de 21 meses de bombardeos.

A mediados de semana, el jefe de prensa del buró político de Hamás, Taher al Nono, había insistido en la necesidad de que las tropas israelíes se retiren por completo de la Franja y, además, haya un cese integral de los combates. El gobierno judío rexhaza esta posibilidad.

Un responsable político israelí acusó a Hamás de negarse "a hacer concesiones" y de llevar a cabo "una guerra psicológica destinada a sabotear las negociaciones" mediante la divulgación de información falsa, que buscaría condicionar a los gazatíes y al público en Israel.

Dijo también que "si Hamás hubiera aceptado la oferta catarí, habría sido posible alcanzar un acuerdo y entrar en las negociaciones de 60 días para terminar la guerra de acuerdo a los objetivos de guerra israelíes".

Los objetivos del primer ministro israelí en y criminal de guerra, Benjamin Netanyahu, son liberar a los rehenes cautivos en Gaza, destruir las capacidades militares de Hamás y expulsar al movimiento de los territorios palestinos.

Hasta ahoa y tras una semana de pláticas, hay algunos avances en temas como el ingreso de ayuda humanitaria al territorio palestino y el intercambio de rehenes por prisioneros.