La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció una sanción a 2 narcotraficantes y 2 empresas mexicanas, por estar presuntamente vinculadas al Cártel Jalisco Nueva Generación.
En un comunicado, la dependencia estadounidense señaló que los narcos mexicanos son: Juan Carlos Bañuelos Ramírez y Gerardo Rivera Ibarra, líderes de células de dicho grupo criminal.
Bañuelos, realiza envíos de metanfetamina y fentanilo a la Unión Americana, además de lavar dinero y supervisar laboratorios de producción de drogas en México, donde se fabrican pastillas de oxicodona falsificadas que contienen fentanilo.
De acuerdo con el Tesoro, "para exportar a Estados Unidos y otros destinos, Bañuelos a menudo ha contrabandeado las drogas dentro de maquinaria. Además, Bañuelos ha comprado armas automáticas para el CJNG y ha buscado drones de alta calidad para la organización".
En cuanto a Rivera, es considerado como un sujeto capaz de suministrar fentanilo, metanfetamina y cocaína hacia el vecino del norte, opera desde Jalisco y "tiene vínculos" con Audias Flores Silva, miembro de alto rango del Cartel, considerado por las autoridades estadounidenses como uno de los "cabecillas" de la actividad narco en el extranjero.
Las empresas mexicanas que resultaron sancionadas son: Fornely Lab S.A. de C.V., que estaría "dedicada al comercio mayorista", y que está vinculada "directa o indirectamente" con las actividades narcos de Rivera.
También fue sancionada la Inmobiliaria Universal Deja Vu S.A. de C.V., por su relación con actividades ilícitas de Bañuelos, quien podría ser su propietario, controla, dirige o actúa en beneficio de la organización criminal a través de esta empresa.
El Tesoro agregó que estas acciones contra el CJNG, fueron coordinadas con el Gobierno de México.
Más aún, el subsecretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, Brian E. Nelson, apuntó que durante "el último mes", han impuesto "5 nuevas rondas de sanciones a organizaciones criminales transnacionales, incluidos traficantes y esquemas de generación de ingresos que alimentan la inundación de fentanilo y otras drogas" en Estados Unidos.
Nelson agregó que ambos países se apoyan en estas labores a través de "sólidas asociaciones" para actuar "contra los flujos financieros del CJNG y otras organizaciones criminales que dañan a los estadounidenses a través del tráfico ilícito de drogas", con el objetivo de "desbaratar las redes financieras ilícitas" de las que dependen los narcotraficantes.
El Cartel Jalisco Nueva Generación es calificado como "uno de los mayores productores y traficantes de fentanilo ilícito" hacia territorio estadounidense.
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