Fue un 6 de noviembre cuando nació Antoine-Joseph Sax fabricante de instrumentos de música, mejor conocido por ser el inventor del saxofón. Abrió los ojos por primera vez un día como hoy pero de 1814, en la provincia belga de Dinant
Cuentan sus biógrafos que desde su infancia trabajó en la fabricación de instrumentos al lado de su padre Charles-Joseph, apodado “Adolphe”, quien estudió para director de música del regimiento de Guides, en Bruselas.
Idealista y con una enorme necesidad de estar activo, Sax, llegó en 1842 a París, y pudo transformar su pequeño taller en una fábrica donde llegó a tener 191 trabajadores hacia 1848, de donde saldrían 20 mil instrumentos entre 1843 y 1860. En el mismo taller, Sax instaló una sala de conciertos de gran repercusión.
Mostró que el timbre de sus instrumentos está determinado no por la naturaleza del material empleado, sino por las proporciones dadas a la columna de aire que se forma en su interior. Sax perfeccionó, engrandeció y completó las familias de casi todos les instrumentos de viento, metal y madera, registrando 26 patentes, siendo el más famoso el saxofón.
Se desconoce el origen de la inspiración que llevó a Sax a crear este instrumento, pero la teoría más conocida y aceptada es que, basándose en el clarinete, instrumento que tocaba, empezó a concebir la idea de construir un instrumento que tuviera la fuerza de uno de metal y las cualidades acústicas de uno de madera, una especie de "clarinete de metal".
También registró, entre 1852 y 1863, varias patentes relativas a timbales, bombo y tambores, e inventó un sistema de silbatos que sería utilizado después en las locomotoras durante casi un siglo. Más aún, en 1881 propuso introducir en la orquesta sinfónica una campana de sección parabólica y de ondulaciones anulares que permitiría variar la entonación a voluntad. También diseñó aparatos de alquitrán, cerosota y otras materias, para purificar e impregnar los vapores que estos materiales liberan en el aire de las salas de los hospitales, en las clases u otros establecimientos públicos.
En 1866, Sax patentó un proyecto de sala de concierto de forma ovoide, proyecto del que Richard Wagner se inspiraría para su teatro en Bayreuth.
En 1881, buscando mejorar la acústica en las grandes salas de espectáculos con aforo para varios miles, Adolphe Sax imaginó un reflector vocal. No dejó jamás de estudiar, inventar y perfeccionar...
A pesar de sus constantes éxitos en las exposiciones de Paris y de Londres, fue atacado, vilipendiado y hasta plagiado, y arruinado económicamente en varias ocasiones.
Nunca se casó pero tuvo 5 hijos. Adolphe Sax murió el 7 de febrero de 1894 en la ruina, pero el saxofón, su invento más original, a punto de ser relegado al olvido, recobró su interés en la época del Art Nouveau y la aparición de jazz, a principios del siglo XX.
