El fiscal especial Jack Smith no quiere que el expresidente convicto Donald Trump se salga con la suya, y presentó ante un gran jurado de Estados Unidos nueva acusación formal de 4 cargos contra el republicano, por su presunto intento de subvertir el resultado de las elecciones de 2020 que perdió con Joe Biden.
En esta querella, Trump "conscientemente, se combinó, conspiró, se confabuló y acordó con co conspiradores, conocidos y desconocidos para el gran jurado, para herir, oprimir, amenazar e intimidar a una o más personas... el derecho a votar y a que se cuente el voto".
De acuerdo con el fiscal Smith, el magnate perdió las presidenciales de 2020 ante el demócrata, pero "estaba decidido a permanecer en el poder".
La acusación se produce luego de que la Corte Suprema de Estados Unidos operó en favor de Trump y dictaminará en julio pasado que era inmune al procesamiento sobre la base de actos oficiales realizados como parte de su rol de presidente.
Aileen Cannon, una jueza de distrito de Florida designada por Trump, dictaminó hace unos días que el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, excedió su autoridad constitucional al nombrar a Smith para el asunto, dando otra victoria en esta carrera legal para librar al republicano de conflictos judiciales.
Cannon calificó a Smith como fiscal no sujeto a la aprobación del Congreso, lo cual ya fue apelado por Smith, buscando revertir esa orden.
Ahora, la acusación enmendada de Smith contra Trump se detalla en 35 páginas, y tiene un conjunto más reducido de acusaciones contra el expresidente, teniendo en cuenta la observación de la Corte Suprema de inmunidad de procesamiento por actos oficiales.
Medios estadounidenses reportan que Smith ha estado consultando con funcionarios en el del Departamento de Justicia varias semanas para reestructurar el caso contra el candidato republicano.
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