El presidente ruso está otorgando la libertad a reos que cumplen penas de cárcel, como recompensa por ir al frente de guerra…
Un informe del canal de Telegram Baza, indica que un policía condenado a 20 años de cárcel por coordinar el asesinato, en 2006 de la periodista rusa Anna Politkóvskaya fue liberado y se encuentra actualmente en Ucrania con el ejército ruso.
Se trata de un checheno de nombre Serguei Jadzhikurbanov, quien fue condenado en 2014 por un tribunal ruso y aceptó a finales de 2022 enlistarse en el ejército para ir al frente de guerra ucraniano a cambio de su liberación.
De acuerdo con el reporte, este sujeto comenzó como comandante de una unidad de inteligencia y fue ascendido a comandante de batallón, según la fuente. Cumplió 6 meses obligatorios de combate, y según Baza, decidió seguir combatiendo aún después de cumplido ese periodo
"He sabido por sus allegados, justo ahora, que desde el inicio de la operación militar especial (...) se le propuso un contrato para participar. Lo hizo y cuando su contrato terminó, fue indultado por decreto del presidente [Vladimir Putin]", indicó el abogado Alexéi Mikhalchik, utilizando el término impuesto en Rusia para hablar de la ofensiva contra Ucrania lanzada en febrero de 2022
Jadzhikurbanov debía purgar una pena de cárcel hasta 2030, pero le propusieron un contrato a cambio de un indulto por su experiencia en una unidad de las fuerzas especiales rusas.
La “justicia rusa” lo había condenado en 2014 a 20 años de prisión al este expolicía y a cadena perpetua tanto a Rustám Majmúdov, autor material del asesinato, como a su tío, Lom-Ali Gaitukáev, quien habría ideado el crimen.
La familia de Politkóvskaya y la dirección del medio Novaya Gazeta, donde trabajó la periodista, han criticado la falta de transparencia de la investigación oficial sobre el asesinato de Politkóvskaya, que fue perpetrado cuando la periodista preparaba un artículo sobre las torturas en Chechenia, el cual que fue publicado por sus compañeros cinco días después de su muerte.
Medios y familiares de las víctimas han denunciado en los últimos meses la puesta en libertad de presos condenados a largas penas de cárcel por graves crímenes, incluido delitos de sangre. A cambio se ello, se les habilita como soldados y se les manda a Ucrania.
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