HRW denuncia tortura a venezolanos en mega cárcel de El Salvador

Si no nos lo dicen ni nos enteramos de algo tan evidente…

La organización no gubernamental Rights Watch (HRW) denuncia que los migrantes venezolanos enviados por el gobierno de Estados Unidos a El Salvador fueron torturados, en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), megacárcel que Donald tTump rentó al presidente salvadoreño Nayib Bukele para confinar a presuntos pandilleros que estuvieron recluidos cuatro meses,

Trump, en acuerdo con Bukele, trasladó entre marzo y abril a 252 migrantes de Venezuela a ese penal acusados sin prueba alguna de pertenecer al grupo criminal Tren de Aragua, designado como organización terrorista por Estados Unidos.

La organización de derechos humanos señala que "los casos de tortura y malos tratos a venezolanos en El Salvador no fueron incidentes aislados cometidos solo por algunos guardias o policías antimotines abusivos, sino (también) violaciones sistemáticas de derechos humanos".

"El informe de HRW se llama "Llegaron al infierno", y fue publicado en conjunto con la ONg centroamericana Cristosal, que cerró sus oficinas en El Salvador en julio pasado denunciando una "escalada represiva" contra los defensores de derechos humanos por parte del gobierno de Bukele..El reporte apunta que  los detenidos permanecieron en un "régimen de incomunicación", alimentación inadecuada y condiciones precarias de higiene.

En un comunicado la directora para las Américas de HRW, Juanita Goebertus, dijo que.”la administración Trump pagó a El Salvador millones de dólares para detener arbitrariamente a venezolanos que luego fueron sometidos casi a diario a golpizas brutales".

Los venezolanos fueron repatriados en julio en un canje de prisioneros entre Washington y Caracas, e investigadores de HRW y Cristosal entrevistaron a 40 de los venezolanos detenidos en el CECOT, así como a 150 personas más entre familiares y abogados

El informe sostiene que los guardias registraban las celdas de los detenidos todos los días, y los presos eran obligados a arrodillarse con las manos atadas a la espalda y eran golpeados con porras y puños, a veces en celdas de castigo. Al menos 3 entrevistados refirieron que fueron víctimas de "violencia sexual". Uno narró que 4 guardias abusaron de él y lo obligaron a "practicar sexo oral" a cada uno de ellos.

Los detenidos, estaban hacinados en grupos de 10 por celda, sin ventanas, con poca comida y el agua potable contaminada. Más aún, afirmaron que antes de las visitas de las delegaciones gubernamentales, recibían colchones, sábanas y artículos de higiene, los cuales les quitaban al finalizar las visitas.

Durante la reclusión, HRW y Cristosal solicitaron información sobre las detenciones a los Gobiernos de El Salvador y Estados Unidos, quienes incurrieron en el delito de "desaparición forzada" según el derecho internacional, por la forma como detuvieron y encarcelaron a los venezolanos