Medios españoles reportan que Ángeles Béjar, madre del presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, fue trasladada a un hospital debido a un "estado de estrés", derivado seguramente de la situación que vive su hijo, suspendido de sus funciones.
Béjar llevaba a cabo una huelga de hambre desde el lunes pasado en una iglesia de la Divina Pastora de Motril, en el barrio Capuchinos de Motril en Granada, como protesta por el linchamiento del que es objeto su hijo y para mostrarle su apoyo.
Citado por la prensa local, el padre Antonio, párroco de la iglesia de Motril,
dijo que "la crisis ha sido ahora, por la calor y por todo. Tenía los pies hinchados y ha ido a más. Se ha puesto nerviosa y se ha puesto en un estado de estrés".
De acuerdo con el religioso, Rubiales habría convencido a su madre para que abandonara el templo, y añadió que luego de este episodio y traslado al hospital, ella no volverá a la iglesia.
La madre del directivo inició la huelga de hambre hasta que se solucione la supuesta "cacería inhumana y sangrienta" contra su hijo, derivado de la polémica generada por el beso en la boca no consentido que Rubiales le dió a la jugadora de la selección femenina de fútbol Jenni Hermoso.
La madre de Luis Rubiales había dicho que su protesta era para que Hermoso dijera "la verdad", porque considera que su hijo "es una persona decente y no es justo lo que están haciendo".
Apenas el martes, la mujer comentó que continuaría en su encierro hasta que su cuerpo aguante. "No me importa morir por la justicia", agregó
