Datos provisionales ofrecidos al término del escrutinio por la Comisión Electoral Central ruso, indican que el presidente Vladímir Putin, resultó reelecto para su quinto mandato que lo mantendrá en el poder hasta 2030.
Putin recibió el 87, 28% de los votos, dejando en el fondo al segundo lugar, el candidato comunista Nikolái Jaritónov con el 4,31%, seguido del representante de Gente Nueva, Vladislav Davankov con solo el 3,85% y a el ultranacionalista Leonid Slutski con 3,2 %.
Se trata de la victoria más contundente de Putin desde su ascenso al poder en el muy lejano año 2000, y agradeció a los rusos el apoyo en las urnas, asegurando que la elevada participación tiene que ver con la guerra en Ucrania.
La oposición estuvo ausente de la boleta porque la Comisión Electoral eliminó del proceso a sus candidatos, argumentando Diversas irregularidades en su registro, lo que no impidió que miles de rusos opuestos al gobierno acudieran al mediodía del domingo a votar en Rusia y en el extranjero, en una muestra de condena contra Putin.
La participación en las elecciones superó el 77,44% del padrón, la más alta de la historia moderna de comicios de Rusia, y según la presidenta de la Comisión Electoral Central, Ela Pamfílova, 87,1 millones personas ejercieron su derecho al voto de un total de 112,3 millones de electores.
La Comisión destacó la afluencia a las urnas en las regiones ucranianas que Moscú se anexionó ilegalmente en septiembre de 2022 y en Crimea, ocupada por Rusia desde 2014.
La Unión Europea no reconoció los resultados de las elecciones en estos territorios y el alto representante para Asuntos Exteriores y Seguridad, Josep Borrell, fijó en una declaración en nombre de los 27, que "la UE reitera que no reconoce ni reconocerá nunca ni la celebración de las denominadas ‘elecciones’ en los territorios de Ucrania ni sus resultados. Son nulas y no pueden producir efecto legal alguno”.
