Este 13 de agosto los cubanos van a recordar un aniversario más del natalicio del líder máximo de la revolución que nació el 1 de enero de 1959, y que hoy prevalece a pesar de todo: Fidel Castro.
Fidel Castro nació el 13 de agosto de 1926 en una granja del Municipio de Mayarí, oriente de Cuba, tercero de los 7 hijos del segundo matrimonio de Ángel Castro y Argiz, propietario azucarero español que emigró de Galicia a Cuba en la guerra entre España y Estados Unidos. Fidel asistió a buenas escuelas católicas en Santiago y La Habana.
Afiliado al Partido del Pueblo Cubano en 1947 y doctorado en leyes por la Universidad de La Habana, se casó con Mirta Díaz Balart en 1948 aunque se divorciaron en 1954.
Se convirtió en el líder del grupo Movimiento, facción antigubernamental clandestina cuyas acciones culminaron con el asalto al cuartel de Moncada el 26 de junio de 1953 por el cual fue encarcelado, después de que Fulgencio Batista tomara control del gobierno cubano en 1952 y estableciera su dictadura.
Se defendió así mismo en el juicio, cuyo alegato se convirtió en discurso (La historia me absolverá), que se convertiría en consigna política para los revolucionarios. Condenado a 15 años de prisión, fue amnistiado en 1955 y se exilió en Estados Unidos y México, donde fundó el Movimiento 26 de Julio.
En 1956 regresó a Cuba con 82 hombres de los cuales 70 murieron en combate nada más desembarcar. Castro, su hermano Raúl y Ernesto Che Guevara se encontraban entre los 12 supervivientes. El Movimiento 26 de Julio fue ganando apoyo principalmente en los ámbitos estudiantiles, y en diciembre de 1958, con respaldo del Partido Popular Socialista, avanzó hacia La Habana, precipitando la Revolución Cubana. Batista huyó el 1 de enero de 1959 triunfando así la revolución popular.
Castro demostró gran poder político, convencido del deber histórico de cambiar el rumbo de la sociedad cubana. Incapaz de contar con el apoyo de los Estados Unidos, Fidel se designó primer ministro en febrero de 1959, cargo que ostentó hasta 1976 en que asumió la presidencia del Consejo de Estado que englobaba la jefatura de Estado y de gobierno. Fracasado su intento de relaciones diplomáticas o comerciales con Estados Unidos, negoció acuerdos sobre armamento, créditos y alimentos con la Unión Soviética y llevó persiguió a sus rivales políticos. Nacionalizó los recursos cubanos, inició la reforma agraria basada en la colectivización de propiedades y estableció un Estado socialista de partido único cuya secretaría general asumiría Castro.
Miles de cubanos se exiliaron y Estados Unidos vio con enojo cómo el nuevo régimen embargaba empresas de titularidad estadounidense, por lo que en 1960 anuló los acuerdos comerciales con Cuba y Castro lanzó su Declaración de La Habana, reafirmando la soberanía cubana frente al imperialismo estadounidense.
En 1961 Estados Unidos apoyó a un grupo de exiliados cubanos en un frustrado intento por derrocarlo en el desembarco de Bahía de Cochinos, por lo que Castro se alineó con los soviéticos, económica y militarmente. En 1962 estuvo a punto de producirse una guerra nuclear, cuando la URSS situó en Cuba cabezas nucleares de alcance medio. Fue la llamada crisis de los misiles, que concluyó tras duras negociaciones entre el presidente John F. Kennedy y el líder soviético, Nikita Jruschov.
A fines de la década de 1980, cuando la URSS inició sus procesos de glasnost (apertura) y perestroika (reestructuración), Castro mantuvo su régimen. Sin embargo, con el derrumbe del comunismo en 1989 en Europa, los problemas económicos de Cuba empeoraron. En 1993, en un intento por alcanzar una economía mixta, Castro aprobó reformas económicas que legalizaron algunas empresas privadas. En octubre de 1995 participa en las celebraciones por el 50 aniversario de la ONU en Nueva York y pronuncia un discurso ante la Asamblea General. En enero de 1998 recibe al Papa Juan Pablo II en La Habana.
Por primera vez en 47 años, Fidel Castro delegó en agosto de 2006 los cargos de primer secretario del Partido Comunista, presidente del Consejo de Estado y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas en su hermano Raúl, segundo hombre del régimen. La razón, una crisis intestinal que le obligó a pasar por quirófano.
El 19 de febrero de 2008, en una carta que publicó el diario 'Granma', Fidel anunció que no se presentaría ni aceptaría el puesto de presidente y comandante en la reunión de la Asamblea Nacional del Poder Popular del 24 de febrero de ese año. Permaneció casi medio siglo en el poder.
Retirado de apariciones públicas y puestos de gobierno, dejó en manos de su hermando Raúl la conducción del país, y falleció en La Habana el 25 de noviembre de 2016 a la edad de 90 años.
