Exdictador sirio y sus primeras declaraciones tras derrocamiento: no habla de riqueza y centros de tortura

El exmandatario sirio Bashar al Assad aseguró hoy al hablar por primera vez de su huida a Rusia que se mantuvo en Damasco hasta las primeras horas del domingo 8 de diciembre, cuando tomó la determinación de irse hacia Latakia "para supervisar las operaciones de combate" cuando los rebeldes, a quienes califica de "fuerzas terroristas" entraron en la capital del país.

Al Assad salió del país por la noche, un día después de la caída de Damasco, luego de percatarse de que las últimas posiciones del Ejército sirio habían caído y las tropas se habían retirado por completo de todas las líneas de combate.

El dictador, quien sucedió en el poder a su parte y gobernó con mano dura Siria a lo largo de casi un cuarto de siglo, declara ahora que "en ningún momento durante estos acontecimientos pensé en renunciar o buscar refugio, ni hubo propuestas así de parte de ningún individuo o partido. La única línea de acción era seguir luchando contra la embestida terrorista".  

Al Assad denunció además la "desinformación y narrativas muy alejadas de la verdad, cuyo objetivo era presentar el terrorismo internacional como una revolución de liberación para Siria".

No dijo nada de los lujos que tenía en un país empobrecido tras una década de guerra civil, ni de los palacios, las colecciones de automóviles y la riqueza en la que vivía, además del hallazgo de centros de encarcelamiento que eran centros de tortura de opositores, quienes se encontraban recluidos en condiciones inimaginables.   

Según Assad, "cuando el Estado cae en manos del terrorismo y se pierde la capacidad de hacer una contribución significativa, cualquier cargo pierde su sentido", y aseguró que esto no quebranta su "sentimiento de pertenencia a Siria y a su pueblo", ni esperanzas de que "Siria vuelva a ser libre e independiente".

Vaya cinismo…

Una coalición de grupos armados de la oposición siria lanzó una ofensiva sorpresa desde el pasado 27 de noviembre contra el Ejército regular, y alcanzó Damasco en menos de 2 semanas, además de tomar ciudades importantes como Alepo, Hama y Homs. Entonces, el dictador sirio, junto con su familia, huyó a Rusia, que le concedió asilo por motivos humanitarios, según Moscú..