Desarrolla innovador tratamiento contra alzhéimer y párkinson

Uno de los grandes retos de la ciencia es encontrar tratamientos exitosos contra ciertas enfermedades, y es el caso de a 'startup' Retro Biosciences de Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, creadora del chatbot de inteligencia artificial ChatGPT.

Se asegura que está a un paso de iniciar el primer ensayo clínico de una pastilla para revertir el alzhéimer y el párkinson, con una inversión inicial de 180 millones de dólares.

Esta prueba será la primera de la empresa de Altman desde su creación en 2021, y esta esperanzadora píldora ha sido llamada RTR242.

Por lo que se conoce, actúa reactivando la autofagia: proceso de reciclaje celular en nuestro cuerpo, el cual suele descontrolarse durante la vejez y se piensa que tiene amplios efectos antienvejecimiento.

De acuerdo con Joe Betts-LaCroix, director ejecutivo de Retro Biosciences e inventor de la computadora más pequeña del mundo, "hay proteínas viejas, mal plegadas, mutadas, rotas e indigeribles dentro de las células que se acumulan con el tiempo. El sistema normal de reciclaje celular se descontrola".

El científico y empresario supone que la compañía habrá administrado la pastilla experimental a su primer paciente para finales de 2025, y la empresa ha expresado su objetivo de recaudar mil millones de dólares con el fin de financiar más ensayos clínicos, los cuales son necesarios para poder obtener resultados significativos.

La píldora RTR242 es una de al menos 3 grandes ideas enfocadas en revertir el envejecimiento en las que la firma trabaja actualmente, y a la tableta contra el alzhéimer, se suma el desarrollo de un tratamiento contra enfermedades sanguíneas (RTR890) como la leucemia, basado en la producción de células madre.

Este tratamiento se encuentra en fase de desarrollo clínico, al igual que una terapia (RTR888) que también utiliza células madre para tratar padecimientos del sistema nervioso central.

La 'startup' de Altman ha expresado que su objetivo es añadir 10 años saludables a la esperanza de vida, manteniendo a las personas sanas, alertas y vibrantes hasta el último día a través de sus tratamientos, más que aumentar la esperanza de vida de 78 a 88 años.