Deciden jugar sin público y en otro país, partido de fútbol de equipo israelí en Europa

La falta de inteligencia por parte de los líderes mundiales para resolver el conflicto bélico en Medio Oriente empieza a permear cada vez más en el deporte.

Esto viene al cuento porque la UEFA tomó la determinación de que el partido de la Liga Europa entre el club Besiktas de Turquía y el Maccabi de Israel, que está programado para el 28 de noviembre, se llevará a cabo en Hungría y no en Turquía como debía ocurrir.

Este encuentro de carácter oficial se jugará en el estadio Nagyerdei de la ciudad magyar de Debrecen y se efectuará a "puerta cerrada por decisión de las autoridades locales", según el comunicado emitido por los dueños del balón en el viejo continente.

De acuerdo con el reporte de la UEFA, se tomó esta decisión luego de que Turquía se negara a permitir que este partido se desarrollara en su territorio, como estaba previsto en el calendario del torneo europeo de clubes.

La medida se adopta luego de los actos de violencia que se suscitaron el pasado 7 de noviembre en Ámsterdam al término del partido entre el Maccabi y el Ajax neerlandés, en donde los locales sepultaron en cuero a los israelíes con marcador de 5-0, y en donde fueron agredidos seguidores del equipo judío, quienes a su vez respondieron con actos de provocación contra manifestantes propalestinos.