Criminal de guerra israelí amenaza: "no ha terminado el combate" en Gaza

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, sigue intentando posponer los juicios que tiene pendientes por corrupción en su país, y afirmó este jueves durante una ceremonia de Estado en memoria de los soldados caídos en el conflicto armado con el grupo palestino Hamás, que "el combate no ha terminado".

En la conmemoración oficial en el cementerio del Monte Herzl, en Jerusalén del segundo aniversario del ataque del 7 de octubre de 2023 de Hamás contra Israel, el criminal de guerra señaló que "el combate no ha terminado aún, pero hay una cosa muy clara: quien levante la mano sobre nosotros sabe que pagará un alto precio".

Netanyahu aseguró que está "decidido a lograr el regreso de todos los rehenes", luego de que Hamás reportara que solo podría entregar 9 de los 28 cadáveres previstos porque tendrá que buscar debajo de toneladas de escombros los cuerpos restantes, y de que entregara desde el lunes en el marco del acuerdo de alto al fuego, 20 rehenes sobrevivientes a cambio de casi 2 mil prisioneros palestinos liberados de cárceles hebreas.

El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, afirmó que reanudaría los combates en Gaza si Hamás no respetaba el pacto de alto el fuego, al considerar que no había devuelto los restos de todos los cautivos fallecidos, en tanto que familiares de rehenes pidieron a Israel suspender el acuerdo de alto al fuego, si el grupo islamista no entrega los cuerpos sin vida de todos los rehenes. 

El Foro de Familias de los Rehenes y de Desaparecidos dijo en un comunicado que “tras el regreso de tan solo dos rehenes fallecidos anoche, con 19 aún retenidos en Gaza, las familias de los rehenes lanzan un claro llamado: Hamás debe cumplir con sus obligaciones en virtud del acuerdo".

Mientras tanto, funcionarios del Gobierno de Estados Unidos aseguraron que no consideran que Hamás haya incumplido el acuerdo de alto el fuego del presidente autoritario Donald Trump, por la demora en la entrega de los restos de rehenes retenidos en Gaza, y que por el contrario, se trabaja con mediadores internacionales para dar apoyo logístico e inteligencia que permita localizar los cuerpos desaparecidos, posiblemente enterrados entre los escombros que dejaron los bombardeos israelíes que destruyeron la Franja de Gaza durante 2 años.

El partido ultraortodoxo Shas, parte de la coalición que conforma el Gobierno israelí, pidió al primer ministro que detenga inmediatamente el acuerdo con Hamás, se cierren los pasos a Gaza y se impida la entrada de ayuda hasta que Hamás no devuelva los cuerpos de todos los rehenes.

En su cuenta de X, el presidente de Shas y actual ministro de Interior y Salud, Aryeh Deryi, indicó que exigía al primer ministro y al gobierno “detener inmediatamente cada parte del acuerdo con Hamás, incluida la apertura del cruce de Rafah, la introducción de ayuda y cualquier acción derivada de ello, hasta que Hamás nos devuelva a los muertos y coopere con total seriedad en esta cuestión”.