La Corte Suprema de Estados Unidos comenzó a debatir la demanda de inmunidad presidencial absoluta que pide Donald Trump, ante la inminencia de los procesos judiciales en su contra por presuntos delitos electorales en los comicios que perdió en 2020, y por la sustracción de documentos clasificados antes de dejar la presidencia en manos de Joe Biden.
El hecho de que el llamado "Supremo" emita un fallo sobre este asunto, va a retrasar el juicio del magnate republicano por presunta interferencia electoral, en un año que tiene agendados comicios presidenciales en noviembre.
La sentencia puede tener importantes repercusiones para el poder ejecutivo, y también para los problemas legales de Trump, que busca competir en la elección de noviembre.
La decisión de la Corte de atraer el pedido de Trump, retrasó el comienzo del juicio en el que se acusa a Trump de conspirar para alterar los resultados de las elecciones de 2020, que ganó el demócrata Biden.
El fiscal especial Jack Smith, presentó en agosto pasado el caso contra Trump y ha presionado para que el juicio comenzara en marzo. Pero los abogados del republicano presentaron varias mociones para aplazarlo, dandando en una de ellas que se apruebe que un expresidente goza de "inmunidad absoluta".
La mayoría de los jueces de la Corte Suprema podría emitir su fallo a finales de junio, y en un principio no parecían inclinados a respaldar la afirmación de Trump.
Pero al menos 4 de los 9 magistrados del tribunal parecieron no estar de acuerdo con el fallo de un tribunal inferior que estipuló que un expresidente no goza de "inmunidad absoluta" frente a un proceso penal después de dejar el cargo.
El presidente de la Corte Suprema, el conservador John Roberts, así se lo dijo a Michael Dreeben, que representaba al fiscal especial.
Enviar el caso nuevamente al tribunal inferior para una revisión adicional retrasaría casi con certeza el juicio por conspiración electoral de Trump hasta después de las elecciones de noviembre.
