¿Hará alguien caso?...
El Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo da a conocer este lunes que la cantidad de armas nucleares en estado operativo aumentó en 2023, escenario que tiene a agravarse porque las potencias impulsan programas de expansión y modernización de sus arsenales.
El mundo en manos de irresponsables y las empresas fabricantes de armas, cada vez más boyantes.
Así, el Instituto precisa que, el total estimado de las12 mil 512 cabezas nucleares que poseían en enero de 2023 las 9 potencias atómicas, alrededor de 9 mil 576 estaban en arsenales para su uso potencial, 1% más que hacia finales de 2021.
Estás potencias son Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Francia, China, India, Pakistán, Israel y Corea del Norte.
De esas, cerca de 3 mil 844 ojivas estaban desplegadas en misiles y aviones y unas 2 mil, casi todas de Estados Unidos y Rusia, en estado de alerta operativa alta.
Sin embargo, el informe de este organismo, da cuenta de una caída interanual de casi 2 puntos en el arsenal nuclear global.
Consuelo que sirve de muy poco.
El arsenal de norteamericanos y rusos, quienes acumulan el 90 % del total de armas nucleares, "parece haberse mantenido relativamente estable", aunque la transparencia en esa área no es tan confiable desde la agresión militar rusa en Ucrania, que comenzó en febrero de 2022.
Se estima que China aumentó en el último año su número de ojivas 17% y se espera que siga creciendo, de modo que a finales de esta década podría tener tantos misiles balísticos intercontinentales como Rusia o Estados Unidos.
Reino Unido aumentaría en el futuro su número de ojivas y Francia continúa con sus programas de desarrollo de una tercera generación de misiles submarinos balísticos nucleares y de misiles crucero, expone el Instituto.
Corea del Norte, India y Pakistán, parecen estar expandiendo sus arsenales. Pyonyang sigue priorizando su programa nuclear como estrategia de seguridad nacional, y se estima que ha montado alrededor de 30 ojivas y posee material fisionable suficiente para entre 50 y 70 más, lo que supone un aumento "significativo" respecto a un año antes.
Israel no admite públicamente la posesión de armas nucleares, pero se cree que está modernizando su arsenal.
El reporte sostiene que "la mayoría de potencias nucleares está endureciendo la retórica sobre la importancia de esas armas y usando incluso amenazas explícitas o implícitas sobre su uso potencial. Esta competición nuclear ha aumentado de forma dramática el riesgo de que se usen armas nucleares por primera vez desde la II Guerra Mundial".
El Instituto advierte que el incremento de la tensión geopolítica y el cierre de canales de comunicación aumenta el riesgo de "errores de cálculo, malentendidos y accidentes" hasta niveles "inaceptablemente altos". El peligro es real y puede ser letal.
El informe del instituto dedicado a la investigación de conflictos, armamento, control de armas y desarme, creado en 1966 con sede en Estocolmo, agrega que "hay una necesidad urgente de restaurar la diplomacia nuclear y reforzar los controles internacionales de armas nucleares".
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