Una nueva andanada de misiles disparados por las fuerzas rusas, que provocaron la muerte de al menos 20 personas e hirieron a otras tantas.
El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, condenó los ataques t subrayó que las leyes humantarias internacionales prohíben agredir a los civiles y los bienes civiles, y urgió a poner fin a la embestida inmediatamente.
En la misma línea, la coordinadora de la ONU para Ayuda Humanitaria en Ucrania, Denise Brown, rechazó la arremetida militar que tuvo como blanco varias ciudades, entre ellas la capital Kiev, Kryvyi Rih y Pokrovsk.
“Las agresiones se produjeron justo cuando la gente empezaba el día. Decenas de personas han muerto y sido heridas”, declaró Brown, y destacó daños graves en el hospital infantil del centro de Kiev.
“Es inconcebible que en esta guerra haya niños muertos y heridos. Según el derecho internacional humanitario, los hospitales tienen una protección especial. Hay que proteger a los civiles”, insistió.
Además del hospital infantil Ohmatdyt de Kiev, fueron afectadas otras infraestructuras públicas, así como edificios comerciales y residenciales en ciudades como Dnipro, Kramatorsk, Kryviy Rih, Kyi y Pokrovsk.
Los datos preliminares indican que al menos 20 personas murieron en los ataques del lunes. Volodymyr Zelenskiy, presidente ucraniano, aseguró que fueron disparados más de 40 misiles.
La agresión ocurre después de que los observadores de la Oficina de Derechos Humanos alertaran que mayo trajo el mayor número de víctimas civiles causadas por ataques rusos en casi un año.
El informe de la Misión de Observación de los Derechos Humanos de la ONU en Ucrania indica entre el 1 de marzo y el 31 de mayo murieron al menos 436 civiles y otros 1760 resultaron heridos.
Entre las víctimas había trabajadores de medios de comunicación, empleados sanitarios y humanitarios y trabajadores de los servicios de emergencia y cortes. El informe agrega que la mayoría (91%) de las víctimas se produjeron en territorio controlado por Ucrania y el 9% en territorio ocupado por Rusia.
En el mismo periodo, las autoridades rusas informaron que 91 civiles murieron y 455 resultaron heridos en Rusia por ataques de las fuerzas armadas ucranianas, principalmente en Belgorod, Briansk y Kursk.
El principal funcionario del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia en Ucrania, Munir Mammadzade, dijo que esa agencia está distribuyendo agua y suministros de higiene a la población afectadas.
“La invasión a gran escala de Rusia continúa afectando a los niños de manera desproporcionada”, sostuvo Mammadzade en una publicación en X, y agregó que “hemos recibido informes horribles de un hospital infantil en Kiev gravemente dañado en un ataque esta mañana, con informes de víctimas, y puntualizó que los niños no son un objetivo y siempre deben ser protegidos".
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