Anuncian Rusia y Bielorrusia ejercicios para uso de armas nucleares y del misil Oréshnik

El organismo gubernamental bielorruso Belta, cita el Ministerio de Defensa bielorruso y anuncia los ejercicios conjuntos de Rusia y Bielorrusia  feniminadow Západ 2025, los cuales incluirán la planificación del uso de armas nucleares y del poderoso misil Oréshnik.

El jefe del organismo, Víctor Jrenin, afirmó que "este es un elemento importante de disuasión estratégica para nosotros. Como exige el jefe de Estado,  debemos estar preparados para cualquier cosa. Vemos la situación en nuestras fronteras occidental y septentrional y no podemos contemplar con calma la militarización y la actividad militar" 

Según Jrenin, Bielorrusia demuestra su apertura y espíritu de paz, pero siempre debe "guardar pólvora seca".

Las maniobras Západ 2025 se efectuarán en Bielorrusia entre el 12 y el 16 de septiembre, yc. según las tareas del simulacro anunciadas por Minsk, el objetivo común es poner a prueba las capacidades de ambos países para garantizar la seguridad militar y la "preparación para repeler una posible agresión".

Oréshnik es el nuevo misil balístico ruso de alcance intermedio, capaz de impactar contra sus objetivos a una velocidad hipersónica de Mach 10, lo que equivale a casi 3 kilómetros por segundo.

La potencia de un ataque masivo con Oréshnik puede ser equivalente a la de un ataque nuclear: todo lo que se encuentra en el epicentro de la explosión se divide en fracciones y se convierte en polvo. De acuerdo con el presidente ruso, Vladímir Putin, "no hay ninguna posibilidad de derribar estos misiles", cuyo alcance llega hasta 5 mil 500 kilómetros, presumiendo su poder destructivo.

El primer uso en condiciones de combate de esta arma tuvo lugar el 21 de noviembre de 2024, cuando "una bola de fuego cruzó el cielo" y destruyó con una "explosión precisa, y aparentemente silenciosa" la planta ucraniana de Yuzhmash: uno de los mayores complejos industriales conocidos desde la época de la Unión Soviética, que producía tecnología de misiles y otras armas para el régimen de Kiev en la ciudad de Dnepropetrovsk.

Lo acordado el año pasado entre Moscú y Minsk implica que los complejos rusos de misiles balísticos llegarán a Bielorrusia para finales de 2025 y ya se determinaron los lugares de su despliegue.

La semana pasada, el presidente ruso, Vladímir Putin, anunció que Rusia inició la producción en serie de Oréshnik.