Amenaza Trump: Hamás no quiere acuerdo, "quiere morir"

Luego de que el grupo islamista Hamás rechazara la propuesta estadounidense vía Israel para lograr un alto al fuego, el presidente convicto Donald Trump hizo lo que mejor le sale, que es lanzar amenazas.

El republicano declaró que el movimiento islamista palestino "quiere morir", tras acusarlo de rechazar un acuerdo sobre un alto al fuego en la destrozada Franja, y en donde la población está siendo exterminada por fuego y hambre.

"Hamás realmente no quería alcanzar un acuerdo. Creo que quieren morir. Y es muy, muy grave", declaró Trump.

Mientras tanto, el primer ministro israelí y criminal de guerra, Benjamin Netanyahu, anunció luego del fracaso de las negociaciones que está "estudiando otras opciones para traer de vuelta" a los rehenes y "poner fin al régimen terrorista de Hamás".

El movimiento islamista señaló al enviado estadounidense Steve Witkoff por tergiversar la realidad para apoyar "a la posición israelí".

Mientras tanto, un funcionario israelí anunció la reanudación de los lanzamientos de ayuda a Gaza, en medio en una catástrofe humanitaria y donde organizaciones oficiales y no gubernamentales alertaron sobre un aumento de la desnutrición infantil.

Para el presidente convlcto, las últimas declaraciones de su homólogo francés, Emmanuel Macron, no tienen relevancia para el rumbo del conflicto en Gaza .

Horas después de que Macron anunciara que Francia reconocerá al Estado de Palestina en septiembre próximo, durante la próxima Asamblea General de las Naciones Unidas, el republicano respondió a su manera el desacuerdo existente con el francés.

Declaró a la prensa que "aquí están las buenas noticias: lo que diga no importa", aludiendo Macron.

"Su declaración no tiene ningún peso. Es un buen tipo, me agrada. Pero su afirmación no tiene ningún peso", recalcó Trump, cuestionando el pronunciamiento de Macron, quien comentó que "la necesidad urgente hoy es que termine la guerra en Gaza y que se rescate a la población civil".

La decisión del gobierno de Francia de reconocer a Palestina fue rechazada por Washington y Tel Aviv.

El primer ministro israelí y criminal de guerra, Benjamín Netanyahu, sostuvo que esta medida "promueve el terrorismo y genera el riesgo de crear otro Estado proxy de Irán, como ocurrió con Gaza". Según él, la existencia de un Estado palestino implicaría que ese territorio fuera una "plataforma de ataque para exterminar a Israel".