Un nuevo encontronazo entre israelíes y palestinos se produjo la madrugada de este miércoles, cuando la policía del estado judío atacó a un grupo de fieles que se encontraban en la mezquita de Al Aqsa de Jerusalén. De acuerdo con la Media Luna Roja Palestina, hubo palestinos heridos, y acuso a las fuerzas israelíes de haber impedido el arribo de personal médico a la mezquita.
Según la policía israelí, en un comunicado tuvo que entrar en el recinto luego de que "agitadores enmascarados" se encerraran en la mezquita con fuegos artificiales, palos y piedras, y asegura que "cuando la policía entró, un grupo numeroso de agitadores les lanzó piedras y disparó fuegos artificiales desde el interior de la mezquita", resultando lesionado un policía.
Grupos palestinos condenaron los ataques de Israel contra los fieles, y dijeron que "advertían a la ocupación de que no cruce las líneas rojas en los lugares santos, lo que provocará una gran explosión", según Nabil Abu Rudeineh, vocero del presidente palestino, Mahmud Abbas.
Varios videos mostraban el estallido de fuegos artificiales y a la policía golpeando a personas en el interior de la mezquita.
Poco después, al menos 9 cohetes fueron disparados en las primeras horas de hoy desde la Franja de Gaza hacia varias localidades del sur de Israel, después de que las fuerzas del orden israelíes atacaran el tercer lugar más sagrado del islam.
