Luego de que las defensas ucranianas derribaron solo 21 de los 34 misiles lanzados por Rusia contra su territorio la madrugada del sábado, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, pidió de nueva cuenta a sus aliados occidentales más sistemas de defensa antiaérea.
El ataque ruso dejo importantes daños en el sistema energético, y Zelenski dijo en su cuenta de X que "logramos interceptar una parte de ellos. Sin embargo, el mundo tiene todos los recursos para ayudarnos a interceptar todos los misiles y drones disparados por los terroristas rusos. Esto es completamente factible. Lo único que hace falta es que se apliquen las decisiones y acuerdos políticos necesarios”.
El ucraniano expuso que lo que su país requiere "son sistemas de defensa aérea, una cantidad y calidad suficientes de armas para garantizar nuestras acciones en primera línea, así como una entrega rápida y una acción firme. El terrorismo siempre debe fracasar".
Finalmente, Zelenski agradeció a Estados Unidos y otros socios su ayuda, luego de que Washington anunciara que liberará 6 mil millones de dólares para aumentar el acceso de Ucrania a misiles Patriot y drones.
El ataque ruso afectó "las infraestructuras energéticas en las regiones de Dnipropetrovsk, Ivano-Frankivsk y Leópolis", informó en Facebook el ministro de Energía, German Galushchenko. Leópolis e Ivano-Frankivsk están en la frontera con la Unión Europea y lejos de la línea del frente.
El primer ministro polaco, Donald Tusk, indicó en X, que uno de los misiles disparados por Rusia cayó a "15 km" de la frontera polaca.
Un alto cargo de los servicios de seguridad de Ucrania, expresó que Rusia intensificó sus bombardeos de la red ferroviaria ucraniana para "paralizar" el envío de equipo occidental,
