Los talibanes que gobiernan Afganistán están cada vez más lejos de cumplir las condiciones internacionales para recibir ayuda financiera, toda vez que mantiene su política de ignorar los derechos de las mujeres, e incluso, profundizar la represión.
Decenas de mujeres se manifestaron este domingo en Kabul contra el régimen de los talibanes, ante la posible imposición de vestimentas como el burka.
También protestaron por la muerte de una joven tiroteada por los islamistas. La joven Zainab Abdullahi murió esta semana cuando regresaba de una boda, después de que los talibanes balearan su auto en un barrio de la minoría hazara en Kabul.
La muerte de la mujer fue denunciada en un vídeo difundido en las redes sociales su hermana Fatima Abdullahi.
Las protestas de las mujeres no se limitaron al asesinato de Zainab, sino que se inconformaron por la supresión de libertades como el impedimento de que las estudiantes de secundaria vayan a la escuela o que las trabajadoras gubernamentales bajan a su empleo.
También protestaron por la posible imposición del burka en lugar del velo islámico, o la imposibilidad de que una mujer vaya en un vehículo si no es acompañada por un hombre de su familia.
La manifestación fue disuelta violentamente por las fuerzas de seguridad de los talibanes, lanzando gas pimienta contra las manifestantes.
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