Este jueves llegó a su término el juicio civil contra el expresidente Donald Trump en Nueva York por el presunto delito de fraude, con los argumentos finales tanto de su de su defensa como de la Fiscalía neoyorkina como parte acusadora.
El juicio comenzó el pasado mes de octubre, y de acuerdo con el juez Arthur Engoron que lo presidió, hará lo posible para que su veredicto esté listo este mismo mes de enero, sin garantizar que así será.
El magistrado dio marcha atrás en su decisión de negarle la palabra al republicano, y esta vez lo permitió para que se defendiera.
La Fiscalía acusó de fraude tanto a Trump como a sus 2 hijos mayores y 2 exempleados de la Organización Trump, por el delito de inflar los activos de la compañía varios años, con el propósito de acceder a mejores condiciones en préstamos y otros beneficios económicos, por lo cual pide se aplique una multa de 370 millones de dólares, además de impedirle hacer negocios inmobiliarios de por vida en Nueva York ni dirigir o ser funcionario de una corporación.
Engorón ya había declarado a Trump responsable de un cargo de fraude desde antes del inicio del juicio, y en la presentación de los argumentos finales, Christopher Kise, abogado de Trump, reiteró sus críticas a la fiscal general del estado, Letitia James por no haber presentado durante el juicio evidencias que prueben el fraude.
Más aún, argumentó que ninguna institución financiera ha emitido un informe de “mala conducta, actividad sospechosa o fraudulenta” contra Trump, y que tampoco hay víctimas como resultado del presunto fraude.
De hecho, Kise aseguró que “en lugar de elogiar al presidente Trump como un exitoso empresario, tenemos una fiscal general persiguiéndolo”, siendo interrumpido varias veces por Engoron ocasiones para hacer preguntas y contrarrestar argumentos.
Al hacer uso de la palabra, Trump aprovechó el tiempo que le dieron para reiterar que es “un hombre inocente”, que no ha “hecho nada malo”, arremeter contra la fiscal general y ratificar que es víctima de una “caza de brujas”. Ni un solo argumento más
La Fiscalía reiteró a su vez en los argumentos que los estados financieros del expresidente republicano fueron falsos de 2011 a 2021, y que esa falsedad llegó a ser en 2014 de hasta 2 mil 200 millones de dólares.
