El gobierno de Rusia organizó para este fin de semana unas elecciones locales carentes de legalidad alguna en las regiones ocupadas militarmente del territorio de Ucrania, con lo cual intenta reforzar el control sobre esas regiones anexionadas hace un año y en las que hay combates entre las fuerzas de los 2 países.
En este escenario de rompimiento de lo que queda del orden internacional, la amañada votación para elegir legislaturas instaladas por Rusia en Donetsk, Luhansk, Jersón y Zaporiyia tendrá una duración de 3 días. Algo que para el Consejo de Europa, responsable continental de losa derechos humanos, constituye “una flagrante violación del derecho internacional, que Rusia continua ignorando”.
Por su parte, el parlamento de Ucrania señaló en un comunicado que la votación en zonas donde Rusia “mantiene hostilidades activas” es una amenaza para la vida de los ucranianos, por lo que llamaron a otras naciones a no reconocer el resultado de las elecciones, algo que quizás solo hagan Bielorrusia, Corea del Norte y Siria.
El Kremlin no tiene pleno control sobre las regiones anexionadas, pero quiere usar las elecciones para para mantener la ilusión de normalidad. Los votantes deben elegir legislaturas regionales, que a su vez nombrarán gobernadores. Los comicios están previstos al mismo tiempo que los de otras elecciones locales en Rusia.
El principal contendiente es Rusia Unida, partido de Vladimir Putin, y la boleta de estos comicios amañados incluye al Partido Comunista y al nacionalista Partido Demócrata Liberal, entre otros. Para algunos residentes en Donetsk y Luhansk, donde hay amplias zonas en manos de separatistas prorrusos desde 2014, la votación no tiene nada de extraño.
En Jersón y Zaporiyia. los trabajadores electorales estarían visitando las casas con soldados armados y la mayoría de los votantes no conocen a los candidatos, de los que alrededor de la mitad habrían llegado desde Rusia. (AP)
