Kevin Strickland es un ciudadano estadounidense que se pasó 43 años en la cárcel acusado y sentenciado por un triple asesinato, y luego de que su vida fue arruinada, el sistema judicial de Estados Unidos acaba de declararlo inocente, y con el clásico “usted disculpe”, y le otorgó las libertad sin ofrecerle alguna otra compensación por destruir su futuro.
Ahora, una iniciativa de donación ha recaudado más de un millón de dólares para el afroamericano, quien salió el pasado martes del penal en Misuri en el que permaneció recluido más de 4 décadas.
Hasta hace unas horas, el altruismo de miles de donadores había hecho posible la recaudación de poquito más de un millón de dólares a la cuenta correspondiente en la plataforma de GoFundMe, creada por la organización no lucrativa Midwest Innocent Project, que ayuda a personas encarceladas pese a ser inocentes.
Los organizadores de la campaña planean reunir hasta 10 millones de dólares en una iniciativa fue lanzada para respaldar a Strickland, que tiene 62 años de edad, en un estado como Misuri, donde solo aquellos sentenciados que luego son exonerados mediante pruebas del ADN, pueden acceder a compensaciones de 50 dólares "por día de confinamiento posterior a la condena".
La petición de ayuda financiera para Kevin expresa que “no tiene antecedentes laborales...necesita ayuda económica para atender sus necesidades básicas al salir de la cárcel. El Sr. Strickland ha sufrido una atrocidad inimaginable y nadie le ha ayudado".
Bueno, miles de personas ya lo están haciendo ante la ausencia de autoridad judicial.
