Los bombardeos del ejército de Israel en Gaza al reanudarse la guerra con Hamás, dejaron de acuerdo con el Ministerio de Salud en el enclave palestino dejaron un saldo de 178 personas muertas y 589 heridas.
Así, el terror envolvió de nuevo a la población civil con el estruendo de las explosiones y los derrumbes derivados de los ataques del ejército hebreo, luego de una semana de tregua.
El cese al fuego no se pudo prolongar, la guerra está cobrando la vida de más inocentes, y en este escenario, Estados Unidos informó luego de la fracasada visita del secretario de estado, Anthony a Tel Aviv y Ramalah para intentar prolongar la tregua, que seguiría presionando para que se extienda el cese al fuego en Gaza.
Según la Casa Blanca, que aseguró ayer que estaba en contra del cese al fuego definitivo, "sigue trabajando con Israel, Egipto y Catar para extender la pausa humanitaria en Gaza", de acuerdo con un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional.
Mientras tanto, el gobierno judío volvió a tomar medidas contra la ONU, y dip a conocer que no sería renovada la visa de la coordinadora humanitaria de la ONU para los territorios palestinos, acusada de no ser "imparcial".
Ella es la canadiense Lynn Hastings, en el cargo desde diciembre de 2020, y que ejercía como adjunta del enviado para Medio Oriente, Tor Wennesland.
Stephane Dujarric,l vocero del secretario general Antonio Guterres, reveló que "fuimos informados por las autoridades israelíes que no renovarán el visado de Hastings después de que expire a finales de este mes".
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