Para la presidenta de Perú, Dina Boluarte, fungir como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional no aplica si se reprimen protestas. Ahí, lo mejor es lavarse las manos. La interina se deslindó de cualquier responsabilidad en la muerte de decenas de civiles en las protestas contra el Gobierno que estallaron desde diciembre pasado Para Boluarte, la represión es cosa de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional. De ella, nada...¿y ella por qué?. La exvicepresidenta peruana que asumió la presidencia tras la detención y encarcelamiento de Pedro Castillo, dijo al diario El Comercio, que "puedo ser la jefa suprema de las Fuerzas Armadas, pero no tengo comando, los protocolos los deciden ellos". En otras palabras, no controla a los militares. "Ni los ministros ni la presidenta tenemos comando para decidir sobre los protocolos que las Fuerzas Armadas o la Policía Nacional tienen. Ellos tienen su propia ley, pero también sus propios protocolos. ¿A quién obedecen? A sus comandos. Nosotros no tenemos comando", dijo. La Constitución peruana dice que "el presidente de la República es el Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas y de las Fuerzas Policiales", por lo que sto tiene responsabilidad sobre las acciones que las fuerzas del orden ejecutan bajo su mandato como jefe supremo. Esto revelaría quien manda en el país sudamericano, luego de que la jefa de Estado aceptara que Fuerzas Armadas y Policía Nacional actuaron bajo iniciaiva propia en las manifestaciones contra el régimen Las manifestaciones tuvieron lugar entre diciembre de 2022 y febrero de 2023, y según la Defensoría peruana, 61 personas perdieron la vida, de los cuales 49 civiles murieron en enfrentamientos con las fuerzas del orden, 11 civiles por acciones indirectas causadas por las protestas y un policía murió presuntamente a manos de manifestantes. Un informe publicado la semana pasada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, reveló que se registraron ejecuciones extrajudiciales de civiles durante la represión de las fuerzas del orden en las manifestaciones contra el Gobierno Las protestas reclamaban la salida de Boluarte y de los miembros del Congreso adelantando las elecciones generales
