La agencia norteamericana AP informa que las plataformas Tinder, Hinge y otras aplicaciones especializadas en citas, son objeto de una demanda colectiva presentada en un tribunal federal de California porque para los denunciantes, fomentan el uso "compulsivo" de las mismas con sus funciones adictivas.
Estas aplicaciones pertenecen a la empresa estadounidense de tecnología Match Group, y la denuncia de 6 usuarios fue interpuesta justo el Día de San Valentín, argumentando que Match Group diseña sus aplicaciones de citas con características similares a las de juegos de manera intencional para "encerrar a los usuarios en un bucle perpetuo de 'pagar para jugar'".
Para los quejosos, la compañía prioriza sus ganancias sobre la oferta de ayudar a sus usuarios a encontrar relaciones amorosas, en donde los clientes deben adquirir onerosas suscripciones con funciones especiales que prometen romance y parejas, convirtiéndolos en "adictos".
De igual forma, los demandantes dicen que "el modelo de negocio de Match depende de generar beneficios a través de la monopolización de la atención de los usuarios, y Match ha garantizado su éxito en el mercado fomentando la adicción a las aplicaciones de citas que genera las suscripciones costosas y un uso perpetuo".
Señalan incluso que las aplicaciones del grupo "emplean características reconocidas de productos que manipulan la dopamina" para convertir a los usuarios en "jugadores atrapados en la búsqueda de recompensas psicológicas que Match hace esquivas a propósito"
Las aplicaciones de Match Group están destinadas para adultos, y hay otras demandas que se han presentado contra otras empresas de tecnología por dañar la salud mental de los jóvenes a través de aplicaciones también consideradas adictivas, como ya sucedió con una aplicación de Meta.
