Han pasado ya 13 años de que se diera un milagro en Chile, con el rescate el 13 de octubre de 2010 de los 33 mineros atrapados, durante 69 días, en una mina de Copiapó. La odisea mereció hasta una película.
El derrumbe de la mina San José ocurrió el jueves 5 de agosto de 2010, dejando atrapados a 33 mineros a 720 metros de profundidad. El yacimiento, ubicado a 30 km al noroeste de la ciudad chilena de Copiapó, era explotado por la compañía San Esteban Primera S.A y el salvamento tuvo un costo de entre 10 y 20 millones de dólares, financiado por privados, el Estado y Codelco
El derrumbe en la mina ocurrió a las 14:05 horas y la empresa propietaria del yacimiento, lo comunicó horas más tarde a las autoridades. Las labores de rescate se iniciaron en la noche del 5 de agosto, y la Oficina de Emergencia del Ministerio del Interior confirmó la identidad de mineros atrapados. La gravedad de la tragedia fue difundida por los medios chilenos la mañana siguiente y poco después se supo que los mineros atrapados eran 33.
Agotadas las posibilidades de una operación de rescate con equipo humano, se optó por efectuar perforaciones sobre la mina dirigidas hacia la zona de refugio mediante máquinas perforadoras de exploración minera. Este operativo se realizó utilizando hasta 10 equipos de sondaje, algunos de punta diamantada y otros denominados de aire reverso -equipos de distinta tecnología y eficiencia- a fin de establecer contacto con los mineros aislados.
Los trabajos de perforación comenzaron en la madrugada del 9 de agosto y avanzaron velozmente, lo que inicialmente implicó algunos contratiempos. El 19 de agosto, a 2 semanas del desastre, una sonda hincada a 760 metros por debajo del cerro San José arrojaba una trayectoria errónea al no dar con el refugio ubicado a 700 metros de profundidad, hasta que perforadoras de mayor precisión, permitieron dar con el refugio de emergencia.
Las labores de rescate comenzaron el mismo día, planificando, asegurando el área, con un reconocimiento de la mina, buscando lugares de acceso, y acumulando recursos humanos y logísticos. Un nuevo derrumbe se produjo en la tarde del sábado 7 de agosto, necesitando entonces maquinaria pesada para continuar con las tareas.
El 22 de agosto, 17 días después del derrumbe, los mineros fueron encontrados con vida, y tras 33 días de perforaciones interrumpidas por problemas en la maquinaria, uno de los 3 planes con la máquina Schramm T130 consiguió romper fondo a 623 metros de profundidad y se instrumentó un plan de entubamiento del ducto
A las 3 de la mañana del día 11 de octubre se anunció que los trabajos de entubamiento habían alcanzado 56 metros, y al mediodía, el ministro de Minería, anunció que el rescate comenzaría a las 12 de la noche del miércoles 13, con una duración aproximada de 48 horas Desde las 12:10, se logró traer a la superficie al primer minero, y luego a los siguientes, a un ritmo de cerca de uno por hora.
Hasta la fecha es el mayor y más exitoso rescate de la historia de la minería, siendo el evento de mayor cobertura mediática de esas características con unos 1300 millones de televidentes, sólo superado por el funeral de Michael Jackson de 2009 y superando por más de 400 millones a la misión del Apolo XI de 1969.
El histórico rescate fue llevado a la pantalla grande con las actuaciones de Antonio Banderas, Juliette Binoche y Kate del Castillo dentro del reparto, y fue hasta hace unas semanas que se determinó el pago de una indemnización para los mineros.
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