El desastre ocasionado por las atípicas lluvias que azotan en estos días el sur de Brasil sigue creciendo, y ahora las autoridades de la ciudades de Porto Alegre interrumpieron las labores de rescate, debido a más lluvias y el riesgo de rayos y fuertes vientos.
El saldo de víctimas mortales es de un centenar, en tanto que los damnificados en búsqueda de refugio supera las 150 mil.
Personal militar utilizó carros anfibios para rescatar a varias personas de las inundaciones en Canoas, al norte de la ciudad, donde las aguas llegaron a una profundidad de 3 metros y las calles sólo pueden transitarse en barco.
La alcaldía de la capital del estado de Río Grande do Sul indicó que la llegada de un nuevo frente de tormentas con vientos que pueden llegar a 90 kilómetros por hora, llevó a decidir la suspensión de la actividad de los equipos, que buscan rescatar a miles de personas que aún están en zonas de riesgo.
Los temporales iniciaron hace más de una semana, cobraron la muerte de 100 personas en Río Grande do Sul y otro fallecimiento en el vecino estado de Santa Catarina, afectado por el fenómeno aunque con una intensidad menor.
El balance agrega que también hay 128 desaparecidos y 372 heridos en Río Grande do Sul, donde el 80 % de los municipios está total o parcialmente bajo el agua, y unas 150 personas han tenido que abandonar sus hogares.
Las autoridades desconocen el costo de la reconstrucción, pues la verdadera magnitud de los daños solo podrá ser calculada una vez que las aguas bajen.
Comments