La Iglesia Católica en México dijo en un comubicado con motivo del inicio de la campaña electoral de 2024, que su deseo es construir juntos, apoyados en la verdad y la justicia, el ambiente propicio para celebrar en paz este importante proceso político.
Afirma que los mexicanos merecemos una jornada histórica que, con una nutrida participación ciudadana, y recordó que no solo se trata de
elegir Presidente de México, sino también Gubernaturas (9 Estados), Congreso Federal (500 Diputados y 128 Senadores), Congresos Locales y Presidencias Municipales.
Señala que sabe de algunos riesgos que amenazan la estabilidad democrática mediante la violencia criminal que, al mismo tiempo, afectan la libertad ciudadana, y asegura que estamos a tiempo de evitarlos confiando en la fortaleza de las instituciones electorales y en la honestidad de los candidatos.
El documento de la Conferencia del Episcopado Mexicano llama a todos a participar en lo que a cada uno le toca, vigilando el proceso electoral en su conjunto, hasta la jornada del 2 de junio, donde los verdaderos demócratas deberán reconocer los resultados sin apasionamiento, dejando de lado intereses partidistas y conductas egoístas.
Sostiene que toca a las autoridades un correcto desempeño en sus responsabilidades para garantizar la participación ciudadana y que todos deseanque este proceso electoral de 2024 sea ejemplo de civilidad a la altura de la cultura
democrática que los mexicanos hemos ido construyendo y perfeccionando en las últimas décadas, a través de leyes e instituciones que nos regulan, por lo que es necesario que los distintos actores políticos sin excepción, cumplan Leyes y Normas en materia electoral.
Indica que toca a los responsables de las Instituciones Electorales, el Instituto Nacional Electoral, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales actuar con apego a la imparcialidad y la justicia, con ética y competencia profesional, para garantizar que el proceso se desarrolle con plena
legalidad y oportuna corrección de anomalías que pudieran presentarse.
La iglesia católica también considera necesario que las autoridades responsables de la seguridad ciudadana y las fuerzas del orden (SEDENA, Guardia Nacional y SEMAR), a nivel estatal y nacional, garanticen la protección y el ambiente de paz, de tal manera que se eviten, por motivos electorales, agresiones, atentados y asesinatos de candidatos, políticos, familiares, periodistas y demás ciudadanos.
Por lo demás, la seguridad deberá estar garantizada en todos los rincones del país el próximo domingo 2 de junio, sin excepción alguna.
Apunta además que el peor de los escenarios, es aquel en el que el crimen organizado y otros grupos delincuenciales intervengan en el proceso electoral, en cualquier lugar y momento.
Para el Episcopado, las condiciones por las que atraviesa el país no son las mejores,
pues dice, es evidente que desde hace tiempo, nuestros problemas son muchos en materia de seguridad, desigualdad social, crecimiento económico, insuficiente empleo formal y digno, cobertura y calidad educativa y de salud, migración, polarización social, y otras problemáticas.
Añade que México necesita campañas electorales, limpias, legales y austeras; con abundancia de propuestas responsables y serias; dejando de lado las descalificaciones de los contrincantes para dar lugar a la búsqueda de soluciones auténticas para nuestros problemas, tomando en cuenta la seriedad de los mismos.
Agrega que todo el proceso se realice por cauces legales para evitar conflictos postelectorales innecesarios y costosos, fundados en posiciones arbitrarias y sin sustento
