La Policía israelí cargó de nueva cuenta contra los palestinos que de encontraban en la mezquita de Al-Aqsa, en Jerusalén, y de acuerdo con La Media Luna Roja al menos 6 personas resultaron heridas.
La acción emprendida por las fuerzas de seguridad israelíes en ese sitio sagrado para los musulmanes es objeto de condena internacional, y además de los 6 lesionados, la policía judía reporta que arrestó de más de 350 personas que, afirma, se habían atrincherado y fueron calificados de "alborotadores" por el Gobierno.
El secretario general de la ONU, António Guterres, dijo que estaba "conmocionado y horrorizado" por la "violencia y las palizas" de las fuerzas de seguridad israelíes, y Washington afirmó que estaba "extremadamente preocupado", y pidió a "todas las partes que eviten una mayor escalada".
Medios locales palestinos informaron que los israelíes irrumpieron en la mezquita de Al-Aqsa y "agredieron brutalmente a los fieles palestinos, golpeándolos con garrotes y lanzándoles granadas aturdidoras, botes de gas lacrimógeno y balas de acero recubiertas de goma como medio para expulsarlos por la fuerza del lugar sagrado", segundo acto violento en la sagrada mezquita en menos de 24 horas.
La agencia oficial de noticias palestina, 'Wafa', dijo que había unos 20 mil fieles orando en el evento nocturno programado por el mes sagrado del Ramadan.
Dos cohetes fueron disparados el miércoles por la noche desde la Franja de Gaza hacia Israel.
Según el primer ministro, Benjamin Netanyahu, "fuerzas de seguridad israelíes se vieron "obligadas a restablecer el orden, luego de que fracasaran los intentos de negociación de las autoridades y los extremistas se negaran a permitir la entrada de fieles musulmanes a la mezquita, e incluso amenazaran con celebrar las oraciones del mediodía de hoy".
Netanyahu, con juicios pendientes en su propio país, agregó que "Israel está trabajando para mantener el statu quo y calmar los espíritus en el Monte del Templo. Los fieles musulmanes en la mezquita de Al-Aqsa testifican que los extremistas musulmanes que se atrincheraron en la mezquita los encarcelaron allí e impidieron que otros musulmanes acudieran a la mezquita a orar. Se atrincheraron en la mezquita con armas, piedras y fuegos artificiales", escribió el premier israelí
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La Mezquita Al-Aqsa se encuentra en la Explanada de las Mezquitas en Jerusalén Este, sector palestino de la Ciudad Santa ocupada y anexionada por Israel.
La explanada está construida en lo que los judíos llaman el Monte del Templo, su segundo lugar más sagrado.
El portavoz del presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Nabil Abu Roudeina, acusó que el nuevo "ataque" israelí contra la mezquita de Al-Aqsa marca "el deseo del Gobierno israelí de sumir a la región en la inestabilidad".
foto ilustrativa
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