Cuando empezó a bombardear la Franja de Gaza, hace cerca de 2 meses, el ejército de Israel afirmó que se concentraría en la ciudad de Gaza y en el norte del territorio palestino, y sugirió a la población civil dirigirse al sur para estar a salvo de los brutales e indiscriminados ataques.
Hoy, el ejército judio ataca norte y sur del enclave, y no hay un solo habitante de la Franja que se sienta seguro. Puede ser asesinado en cualquier momento, y la comunidad internacional seguirá callada.
Así se han consumado los genocidios a lo largo de la historia.
Israel anunció que sus fuerzas militares expandieron sus operaciones terrestres hacia el sur de la Franja de Gaza, zona donde hasta ahora no había ataques las tropas.
La acción ocurre después de que el ejército israelí comenzara su ofensiva terrestre en el norte del enclave costero palestino, pretextando actuar contra objetivos del grupo Hamás, según el portavoz del ejército Daniel Hagari.
En las últimas horas, Israel ordenó la evacuación de barrios de la ciudad sureña de Jan Yunis, desde donde población civil se desplazan ahora para Rafah.
Las autoridades israelíes tienen por objetivo eliminar a los líderes e integrantes de Hamás en cualquier lugar del mundo, declaró el director de la Agencia de Seguridad de Israel (Shin Bet), Ronen Bar.
"En todas partes: en Gaza, en los territorios palestinos, en el Líbano, en Turquía y en Catar. Esto nos llevará varios años, pero estaremos allí para hacerlo", dijo Bar, citado por el medio Haaretz.
