La agencia local austriaca de noticias APA informa que los trabajos de reconstrucción de la casa en la que nació en 1889 el dictador nazi Adolfo Hitler en la ciudad de Braunau en el norte de Austria, han dado comienzo con el objetivo de erigir ahí una comisaría de policía y una sucursal de la Academia de Seguridad.
En los nuevos locales se impartirá cursos a policías sobre derechos humanos, algo que en su momento generó algunas críticas ante presuntas coincidencias con lo que deseaba hacer el líder nazi, cosa que está totalmente fuera de lugar porque si algo no respetaba el dictador, eran los derechos humanos.
Las obras de reconversión del inmueble estarán terminadas para 2026, y será entonces que el edificio vuelva a ocuparte tras permanecer vacío desde 2011. Era usado hasta ese año por la organización Lebenshilfe, que presta ayuda a personas con discapacidad intelectual.
La casa pertenece al Estado austriaco desde 2016 y el debate sobre el destino que debía tener has sido objeto de polémicas. Por ejemplo, la iniciativa Diskurs Hitlerhaus con la agrupación “Amigos de Yad Vashem”, un Centro de Investigación y Conmemoración del Holocausto de Jerusalén, pretendía que el inmueble albergara la exposición hoy itinerante, titulada “Los Justos”, sobre personas no judías que arriesgaron sus vidas para salvar a judíos de la persecución nazi.
Sin embargo, se decidió convertir la casa en una comisaría, con un presupuesto que se estima ascenderá finalmente a los 20 millones de euros.
Una comisión de expertos creada en 2016 para analizar el trato que debía recibir la casa natal de Hitler, propuso darle un uso benéfico-social u oficial-administrativo, con el fin de acabar con el atractivo turístico de la casa para los neonazis, eligiendo finalmente la segunda opción. La medida fue criticada en la película de Günter Schwaiger, “¿Quién teme a Braunau?”, estrenada este verano.
Schwaiger encontró un reportaje periodístico de 1939 que mostraba el deseo de Hitler de que su casa natal, que abandonó a los tres años de edad, se convirtiera en la sede de las oficinas de la jefatura del distrito, es decir, que tuviera fines administrativos. Según el director, la conclusión que se puede sacar es que construyendo una comisaría en la casa natal del dictador se están cumpliendo sus deseos (Efe)
