El gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció hace unas horas que fletará autobuses para transportar a los migrantes en situación administrativa irregular que atraviesen la frontera sur del país hasta Washington D.C. tras calificar a los migrantes de "hordas" y de "ilegales".
En conferencia de prensa, el republicano advirtió que "los estamos enviando al Capitolio de los Estados Unidos, donde la administración de Biden podrá abordar de manera más inmediata las necesidades de las personas a las que están permitiendo cruzar nuestra frontera".
Asimismo, el Departamento de Seguridad Pública de Texas y el Departamento Militar de Texas, mencionan en un comunicado que "están preparando bloqueos de botes adicionales, desplegando alambre de púas en cruces de aguas bajas y áreas de alto tráfico, e instalando bloqueos de contenedores para detener el flujo de cruces ilegales".
De igual manera, reforzarán las inspecciones de seguridad de vehículos que crucen los puertos de entrada internacionales a Texas.
Abbot indicó que "las políticas de fronteras abiertas de la Administración Biden han allanado el camino para que cárteles peligrosos y drogas mortales ingresen a los Estados Unidos, y esta crisis solo empeorará si se pone fin a las expulsiones del Título 42", aplicadas desde marzo de 2020 en la administración de Donald Trump.
El Título 42 ha permitido a las autoridades estadounidenses deportar migrantes irregulares a México y otros países cuando eran detenidos por las patrullas fronterizas, sin permitirles ejercer su derecho a solicitar asilo o ser oídos por un juez por cuestiones sanitarias derivadas de la pandemia de Covid.
Se estima que habría unos 900 autobuses en esta operación y, según el jefe de la División de Manejo de Emergencias de Texas, Nim Kikk, habría tantos autobuses disponibles como sea necesario para trasladar a los migrantes detenidos.
El asesor principal de políticas del Consejo de Inmigración Estadounidense no partidista, Aaron Reichlin-Melnick, advirtió que si algún migrante es transportado en contra de su voluntad se estaría produciendo una violación de la ley federal.
La Casa Blanca confirmó que cuando suspenda en mayo el Título 42, su mensaje seguirá siendo el mismo que envió cuando el presidente Joe Biden llegó al poder hace más de un año: "No vengan". Así lo aseguró la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, al comentar los planes para que el próximo 23 de mayo deje de aplicarse el polémico Título 42, por el que Estados Unidos deporta a la mayoría de los indocumentados que llegan a su frontera sur, sin darles oportunidad de solicitar asilo.
