- bambarito59
Finaliza pandemia de coronavirus pero Covid se queda

El Comité de Emergencia de la Organización Mundial de la Salud declaró ayer que la emergencia de salud pública que comenzó el 30 de enero de 2020 ha dejado de existir. Esto no significa que desapareció el Covid.
El doctor Tedros Adhanom Gebreyesus, titular de la OMS, recordó que hace 1221 días, la Organización tuvo conocimiento de un conglomerado de casos de neumonía de causa desconocida en Wuhan, China, por lo que "el 30 de enero de 2020, por consejo de un Comité de Emergencia convocado en virtud del Reglamento Sanitario Internacional, declaré una emergencia de salud pública de importancia internacional por el brote mundial de COVID-19, el nivel más alto de alarma en virtud del derecho internacional”.
En ese tiempo, la OMS ha recibido la notificación de casi 7 millones de muertes, pero se sabe que el número de víctimas es varias veces superior: al menos 20 millones, según los datos que maneja.
Además Tedros recordó que los sistemas de salud se han visto gravemente perturbados y millones de personas no han podido acceder a servicios sanitarios esenciales, como las vacunas infantiles, vitales para salvar vidas.
También explicó que la pandemia ha causado trastornos económicos, borrando billones de dólares del PIB, perturbando los viajes, el turismo, y el comercio, cerrando empresas y sumiendo a millones de personas en la pobreza.
Otros graves trastornos sociales se produjeron con el cierre de fronteras, restricción de movimientos, cierre de escuelas y otros muchos continúan, como los millones de personas que sufren soledad, aislamiento, ansiedad y depresión, además del COVID largo.
“El COVID-19 ha dejado al descubierto y ha exacerbado las divisiones políticas dentro de las naciones y entre ellas. Ha erosionado la confianza entre las personas, los gobiernos y las instituciones, alimentado por un torrente de desinformación. Y ha dejado al descubierto las desigualdades más acuciantes de nuestro mundo, siendo las comunidades más pobres y vulnerables las más afectadas, y las últimas en recibir acceso a vacunas y otras herramientas”, aseguró Tedros.
El dirigente de la OMS comentó a continuación que, no obstante, durante más de un año, la pandemia ha seguido una tendencia descendente, con un aumento de la inmunidad de la población gracias a la vacunación y la infección, una disminución de la mortalidad y una reducción de la presión sobre los sistemas sanitarios.
“Esta tendencia ha permitido a la mayoría de los países volver a la vida que conocían antes de COVID-19”, observó, para comentar después que, durante el último año, el Comité de Emergencias y la Organización Mundial de la Salud han estado analizando detenidamente los datos y considerando cuándo sería el momento adecuado para rebajar el nivel de alarma.
Sin embargo, el máximo responsable de velar por la salud pública mundial advirtió que “esto no significa que COVID-19 haya dejado de ser una amenaza para la salud mundial”.
De hecho, la semana pasada, COVID-19 se cobró una vida cada tres minutos y miles de personas de todo el mundo luchan por su vida en unidades de cuidados intensivos, mientras millones siguen viviendo con los efectos debilitantes posteriores a la infección.
Explicó que lo que la noticia significa es que ha llegado el momento de que los países pasen del modo de emergencia a la gestión del COVID-19 junto con otras enfermedades infecciosas.
Recordó que la agencia de la ONU ha publicado esta semana la cuarta edición del Plan Estratégico Mundial de Preparación y Respuesta frente al COVID-19, en el que se describen medidas esenciales para los países en cinco ámbitos básicos:
Vigilancia colaborativa
Protección de la comunidad
Atención segura y escalable
Acceso a contramedidas
Coordinación de emergencias.
Durante más de 3 años, los expertos del Comité de Emergencias han dedicado su tiempo, su experiencia y sus conocimientos, no sólo para aconsejar sobre si el COVID-19 sigue representando una emergencia sanitaria mundial, sino también para asesorar sobre las recomendaciones para los países.
Mis colegas han trabajado incansablemente para que las vacunas y otros suministros lleguen más rápidamente a más personas. Y han contrarrestado la desinformación con información precisa y fiable. No tengo palabras para expresar mi gratitud a todos los que, como yo, están orgullosos de ser de la OMS”, concluyó