Una investigación de la que da cuenta la agencia noticiosa AP, indica que más de 6 de cada 10 abortos en Estados Unidos fueron realizados durante 2023 utilizando fármacos, lo que representa un aumento del 53% respecto a lo registrado en 2020.
Según los investigadores del Instituto Guttmacher, entidad no gubernamental que apoya el derecho al aborto, se registraron alrededor de 642 mil 700 abortos con medicamentos en el primer año completo transcurrido desde que la Corte Suprema de Estados Unidos anuló el fallo del caso de Roe vs. Wade, cercenando el derecho a abortar para millones de mujeres en todo el país.
Los abortos farmacológicos representaron el 63% de los procedimientos de interrupción del embarazo en el sistema de salud oficial, y los datos fueron publicados una semana antes de que La Corte Suprema, claramente conservadora, escuche los argumentos de un caso que podría afectar la manera en que las mujeres acceden a la mifepristona, fármaco que suele utilizarse con otra píldora en abortos farmacológicos.
La investigadora del Instituto Guttmacher, Rachel Jones, dijo que el aumento no fue una sorpresa, y explicó que “ahora es posible en algunos estados, por lo menos para los proveedores de atención médica, enviar la mifepristona a las casas de la gente”, ahorrando a las usuarias gastos de desplazamiento, además de que “les evita faltar al trabajo”.
Las cifras del Instituto se recopilan contactando a proveedores de abortos, no toman en cuenta los abortos autogestionados con medicamentos que se llevan a cabo afuera del sistema sanitario ni los medicamentos abortivos enviados por correo a personas que residen en estados que prohíben el aborto.
Los datos muestran que los abortos con medicamento han aumentado de forma constante desde que la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos aprobó la mifepristona en 2000, un fármaco, que bloquea la hormona progesterona, y prepara al útero para responder al efecto contractivo de otro medicamento, el misoprostol.
El tratamiento con 2 fármacos se utiliza para interrumpir el embarazo hasta las 10 semanas de gestación, pero el caso presentado ante la Corte Suprema podría suspender el acceso a la mifepristona enviada por correo e imponer otras restricciones, aún en estados donde el aborto sigue siendo legal.
Así funciona la Corte en Estados Unidos…
