El expresidente francés Nicolas Sarkozy fue declarado hoy culpable de financiamiento ilegal de su campaña política de 2012, luego de que hace 7 meses también había sido condenado por corrupción y tráfico de influencias.
Sarkozy se habría beneficiado entre 2007 y 2012 de un sistema de doble contabilidad puesto en operación para rebasar los límites de gasto impuestos por la ley francesa, de acuerdo con el Tribunal que lleva el caso.
El exmandatario fue condenado en marzo pasado en primera instancia a tñ3 años de cárcel, 2 de ellos exentos de cumplimiento y el otro en arresto domiciliario.
Sarkozy, que negó los cargos donde se le acusó de haber gastado unos 22,5 millones de euros, casi el doble del importe máximo legal en su campaña de reelección de 2012, no se presentó al tribunal para escuchar la sentencia.
De cualquier forma, el dirigente de 66 años de edad perdió esa elección ante el socialista François Hollande, y los fiscales estiman que Sarkozy sabía antes de las elecciones que sus gastos se acercaban al máximo legal, habiendo ignorado reportes de sus contables advirtiendo sobre el rebase del tope de gastos de campaña.
Los jueces indican que Sarkozy es "el único responsable de la financiación de su campaña" y decidió rebasar el límite organizando gigantescos mítines
Además del ex presidente, fueron juzgadas 13 personas, entre miembros de su partido, contables y responsables del grupo de comunicación encargado de organizar los mítines, quienes enfrentan cargos de falsificación, abuso de confianza, fraude y complicidad en la financiación ilegal de la campaña.
Los fiscales han solicitado en su mayoría penas de prisión suspendidas, y hasta un año de cárcel para el cofundador de Bygmalion. Para el expresidente se solicitó contra él un año de prisión, con 6 meses de suspensión.
Sarkozy está en libertad a la espera de la apelación. Se retiró de la política activa en 2017, pero sigue desempeñando un papel tras bambalinas.
