Exigen seguidores de equipos europeos privilegiar deporte sobre negocio

Los planes de equipos de fútbol españoles e italianos para llevarse partidos oficiales de sus torneos locales al extranjero, no son del agrado de sus seguidores.

Aficionados de centenares de 400 grupos de seguidores de clubes en Europa pidieron a la FIFA y a la UEFA bloquear las solicitudes de las ligas española e italiana para jugar partidos rn otros paises

Privilegiando el dinero sobre la identidad con sus aficionados, la mercenaria federación española de fútbol aprobó planes para que el Barcelona juegue contra el Villarreal en Miami en diciembre, en tanto que la Serie A italiana quiere que el AC Milán reciba en febrero al Como en Perth, Australia.

Antes de la reunión del comité ejecutivo de la UEFA la próxima semana en Albania, el grupo de enlace con los aficionados, Football Supporters Europe, busca mostrar la magnitud de la oposición a los partidos “fuera del territorio”.

Está agrupación de aficionados al fútbol fieles a sus equipos, han hecho su llamado a la UEFA, la FIFA y todas las asociaciones nacionales "para que se mantengan firmes, desempeñen su papel como reguladores del juego y aseguren que el fútbol permanezca arraigado en nuestras comunidades, donde pertenece”.

La postura cuenta con el apoyo de grupos de aficionados en 25 países

Football Supporters dice que "los clubes no son ni empresas de entretenimiento ni circos itinerantes. Existen para el beneficio de sus comunidades y proporcionan un sentido de pertenencia, donde los aficionados han estado asistiendo a los partidos en casa durante generaciones” 

La integridad deportiva de las ligas también se vería desequilibrada y dañada, apuntan críticos de los planes, incluido el principal funcionario deportivo de la Comisión Europea en Bruselas, Glenn Micallef.

El comité de gobierno de la UEFA se reúne el 11 de septiembre en Tirana, presidido por su presidente Aleksander Ceferin. 

Sugirió que la UEFA debe hablar con la FIFA y actualmente tiene un poder legal limitado para detener los partidos en el extranjero si las federaciones nacionales involucradas están de acuerdo con ellos. AP