Los españoles inician esta semana no solo con el día del amor y la amistad. sino con la esperanza de una mejor calidad de vida cotidiana dejando de lado buena parte de las medidas de contención del COVID-19 aplicadas para enfrentar la última ola de contagios, y gracias a que hay una mejor situación epidemiológica.
Tras eliminar el uso obligatorio de cubrebocas, España entra desde hoy en una nueva fase de desescalada con la mayoría de territorios del país terminando con la reducción de aforos o presentación del certificado Covid en diversos establecimientos y sitios de esparcimiento.
Sin embargo, el relajamiento se produce cuando en las últimas horas se contabilizaron 49 mil 004 nuevos casos y 389 muertes por la enfermedad.
En España, la aplicación de medidas sanitarias por la pandemia lo realizan cada una de las 17 comunidades autónomas, y actualmente, las únicas medidas obligatorias a nivel nacional son el uso de cubrebocas en espacios interiores y la limitación de aforo en eventos masivos, así como cuarentena de los infectados.
Cifras del Ministerio de Sanidad dados a conocer el pasado viernes, señalan que la incidencia acumulada del Covid-19 sigue a la baja y descendió de los 1.500 contagios por cada 100 mil habitantes.
El País Vasco retira esta semana todas las restricciones que había impuesto en invierno, Galicia y Navarra anunciaron la relajación de las restricciones horarias en la hostelería, Andalucía y Navarra suprimieron la obligación de enseñar el pasaporte de vacunación en el interior de restaurantes, bares y ocio nocturno, y Cataluña ya reabrió el ocio nocturno, al tiempo que Madrid, Islas Baleares, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Extremadura, levantaron gran parte de las restricciones.
