Desaparecen actividades cotidianas en poblados estadounidenses habitados por migrantes
- Información 25
- 6 jul
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El miedo que ocasionan las redadas que realiza en algunas zonas de Los Ángeles el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) está provocando entre otras cosas la aparición de pueblos en los que no hay gente en las calles.
Un ejemplo de ello es Santee Alley en el llamado Distrito de la Moda, en donde, contra lo que pasaba en temporada de verano a propósito de las vacaciones cuando las tiendas estaban colmadas de clientes, hoy, la mayoría están cerradas.
Para el presidente y director ejecutivo del Distrito de Mejora Comercial del Distrito de la Moda de Los Ángeles, Anthony Rodríguez, esto "es algo sin precedentes. personalmente, creo que el impacto de esto es más significativo que el de la pandemia durante las fases de confinamiento".
Entrevistado por la cadena CNN, Rodríguez, dijo que la afluencia de visitantes ha disminuido en 45%, lo que significa entre 10 mil y 12 mil compradores menos por día ñ, desde que iniciaron los primeros operativos migratorios de junio, al sur del centro de Los Ángeles donde se encuentra el Distrito de la Moda.
Un informe del Instituto Económico del Consejo del Área de la Bahía señala que los 2,3 millones de inmigrantes indocumentados que viven en California aportan más de 23 mil millones de dólares en impuestos locales, estatales y federales, y que, en un escenario en el que todos fueran deportados, el producto interno bruto (PIB) del estado disminuiría 278 mil millones de dólares.
Para la directora de investigación del instituto autor del estudio, Eleni Kounakakis, "eso representa el 9% de nuestro PIB. Ese valor es mayor que el de todo el estado de Nevada y el de todo el estado de Oregón. No son números insignificantes".
Sostiene que "estos trabajadores realmente contribuyen a todo un motor económico que, cuando una parte se desmorona, cuando destituimos a estos trabajadores que representan el 8% de la fuerza laboral, tiene un efecto dominó que va mucho más allá de la deportación de un solo trabajador".
Días después de las redadas del ICE en Los Ángeles, empresarios hoteleros y agropecuarios pidieron al presidente convicto Donald Trump, frenar los operativos, ya que la mayor parte de sus empleados son inmigrantes indocumentados.
Empresas de otras ciudades, como Omaha en el estado de Nebraska, también han advertido sobre el riesgo que corren sus operaciones de continuar los operativos.
foto: Los Ángeles. archivo
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