La agencia Bloomberg cita una demanda antimonopolio presentada por un grupo de consumidores ante un tribunal federal de San Francisco contra la compañía franco-italiana EssilorLuxottica, propietaria de las marcas de gafas Ray-Ban y Oakley. La querella fue presentada por presuntamente conspirar con sus competidores para inflar los precios de sus productos hasta en mil por ciento. La denuncia precisa que la compañía señalada, considerada la mayor empresa de gafas del mundo es la "instigadora y principal ejecutora" de la trama de fijación de precios en el mercado estadounidense Se asegura que formó acuerdos ilegales con Frames for America Inc. y For Eyes Optical Co., entre otras firmas. El documento judicial detalla que la empresa oftalmológica EyeMed, filial de EssilorLuxottica, pactó acuerdos anticompetitivos con proveedores de servicios oftalmológicos para "encauzar a millones de consumidores hacia la compra de las gafas sobrevaloradas del conglomerado". Los demandantes apuntan que la colusión ilegal se ocultó mediante un acuerdo entre las empresas para evitar que se hicieran públicos los términos de los acuerdos. Bloomberg añade que otros 20 fabricantes de gafas de lujo también figuran en la demanda.
