La Convención Ciudadana sobre el fin de la vida, aprobó el domingo el 92% del informe final que aboga por la regularización de la muerte asistida.
El grupo creado el pasado septiembre para debatir una posible legalización de la eutanasia en el país, prevé que sus conclusiones deriven en una votación en el Parlamento o un referendo.
El informe final que se pronuncia por la autorización de la "asistencia activa al morir" recibió 92% de votos a favor, 3% en contra y 5% de abstención.
La Convención está compuesta de 184 ciudadanos escogidos de forma aleatoria el pasado mes de septiembre por el Gobierno, la cual ha discutido este asunto en coordinación con los trabajadores de la salud.
Luego de la elección del comité, las autoridades habían informado que el grupo entregaría sus conclusiones en marzo de 2023.
Al mismo tiempo, los gobiernos locales han organizado encuentros en las regiones para discutir sobre la eventual medida, toda vez que, en su campaña a la reelección, el presidente Emmanuel Macron prometió abrir el debate sobre la eutanasia.
De acuerdo con el Palacio del Elíseo, se mantendrían conversaciones con legisladores de todos los partidos para
encontrar el mayor consenso posible.
Encuestas recientes a lo largo del país han mostrado que la mayoría de ciudadanos apoya la potencial legislación.
En la actualidad algunos pacientes franceses viajan a otros países europeos para buscar más opciones para terminar con su vida.
Según la normativa actual en Francia, recogida en la ley Claeys-Léonetti de 2016, está permitido que los cuidadores sometan a una sedación irreversible a aquellos pacientes al borde de la muerte, pero la legislación no llega a autorizar la "asistencia activa al morir", considerada por algunos como "un suicidio asistido" o un acto de eutanasia.
